*GATO CON PESADILLAS* La suba del riesgo país, tira las PPP por la borda y con eso las esperanzas de reelección de  Macri

Para 2019, año electoral, el Gobierno ponía todas sus fichas al relanzamiento de una seguidilla de obras públicas a través de los proyectos de Participación Público-Privada (PPP) en medio del ajuste. Sin embargo, la suba del Riesgo País, orillando los 800 puntos, se tranformó en un golpe mortal para ese salvavidas que para la administración macrista iba a significar llevar adelante esos emprendimientos.

Tanto es así, que el Gobierno confirmó que se vio obligado a congelar los proyectos que se iban a financiar de esta manera ante el encarecimiento del crédito externo por el incesante aumento del riesgo. Es que el financiamiento externo por parte de los privados es la piedra angular del sistema PPP.

Este incremento del Riesgo País marca la creciente desconfianza en que la Argentina no pague sus deudas. O, como lo planteó el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, “la suba del Riesgo País está diciendo: no creo que la Argentina pueda pagar”.

La caída de los PPP fue oficializada después de la incorporación de una obra en Mendoza que iba a realizarse bajo aquel esquema, pero que al final se materializará a través de una licitación clásica, con financiamiento estatal.

Fue el mismo ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, quien le confirmó al gobernador Alfredo Cornejo que el proyecto de la represa hidroeléctrica Portezuelo del Viento sobre el río Grande quedaba fuera del programa PPP, porque el mismo está paralizado debido a las altas tasas de interés que rigen en la actualidad.

“La decisión que se tomó es porque, con este índice de Riesgo País, es muy caro la toma de crédito. En este contexto es imposible. Ahora quedará todo en stand by, lo que ya se licitó sigue, el resto quedará a la espera”, reveló una alta fuente de la Casa Rosada.

Cualquier financiamiento privado para Portezuelo del Viento debería ser cerrado hoy con tasas que alcanzarían el 11 % anual en dólares, un costo altísimo que no paga casi ningún otro país del mundo excepto Venezuela, y que la Argentina no puede afrontar, explican.

fuente:Info135