"Robles dejó todos los dedos marcados en esta investigación y creo que Rosatti también va a terminar mal, de la misma manera que Micheli y Jaime", definió Tailhade. Al mismo tiempo, señaló que "esta causa es una gran bola de humo" y sentenció: "No veo ninguna actividad que tenga que ver con el espionaje ilegal o con inteligencia. No me cabe ninguna duda de que puede haber una causa perfectamente armada".

Una definición incómoda para el oficialismo

Para el legislador, los "operadores judiciales" van a "fundamentar que nuestra eventual acusación se basa entre otras cosas en pruebas ilegalmente obtenidas". Sobre esa base, "van a atacar el juicio político", sumó el diputado. "Querían forzar a que el oficialismo tome una decisión antes de la elección porque no es una definición cómoda para la campaña y para el candidato", analizó.

"Ellos querían aprovechar si podían enterrar el juicio antes de las elecciones. No lo van a logra porque haremos lo que tengamos que hacer. Ninguna de estas mafias nos van a sacar del camino", continuó Tailhade. En segundo lugar, argumentó: "Estamos disputando el voto de un sector del electorado más conservador, que votó históricamente a la UCR. A ese público está dirigido esta operación para que entre en su consideración".

Fuente: El Destape