Una situación inédita y dramática tuvo lugar en las últimas horas en la guardia de una comisaría de la ciudad de La Plata hasta la que se acercó una mujer con un chico de 10 años de la mano. En medio de una crisis de llanto, el menor contó que en su casa le pegaban.

A simple vista, el nene tenía moretones en los brazos y en el torso. La mujer que lo acompañaba era una vecina y confirmó su relato sobre el maltrato psicofísico del que era víctima tanto él como su hermanito de tan solo diez días.

“El nene, en medio de una crisis de llanto, contó que sufría golpes en su hogar, por lo que en el marco de hacer cumplir los derechos del Niño se activó el protocolo”, confirmó una fuente policial a los medios locales. Los efectivos policiales se trasladaron al domicilio de la víctima, entrevistaron a la dueña de la casa, una mujer de 30 años, y tras informar de la situación, el personal de la Dirección de Niñez y Adolescencia del Municipio puso en resguardo a los dos menores.

Según detallaron, la situación de desamparo en la que vivían los hermanos ponía en riesgo su salud y hasta su vida. En tanto, el mayor de los chicos presenta “parálisis cerebral, retraso madurativo y disminución visual”.

La causa por maltrato infantil es investigada por la fiscal Virginia Bravo, de la UFI N°7. También se le dio intervención al organismo de Políticas de Género. Hasta el momento, la madre de los menores permanece en libertad.

En la Argentina, los métodos de disciplina violenta, que incluyen castigos físicos y maltrato psicológico, afectan a 7 de cada 10 chicos y chicas de entre 2 y 4 años, según el estudio global “Una situación habitual: violencia en las vidas de los niños y los adolescentes” difundido por UNICEF.

Uno de los capítulos del estudio analiza la utilización de métodos de disciplina violentos. En la Argentina, más del 95% de los adultos cree que los chicos y chicas no deben ser castigados físicamente. Sin embargo, en el 70% de los hogares se utilizan métodos de disciplina que incluyen violencia física o verbal, tales como el zamarreo, chirlos, cachetadas, golpes y gritos.

“La violencia hacia los chicos es una problemática global y es especialmente preocupante cuando ocurre al interior de los hogares e involucra a los adultos cuidadores, personas que en lugar de proteger y acompañar a los niños en su crecimiento, los lastiman física y emocionalmente”, afirmó Roberto Benes, Representante de UNICEF Argentina. “La violencia durante la infancia y la adolescencia deja marcas imborrables en los chicos y tiene consecuencias en su desarrollo presente y futuro”, agregó.

Fuente: TN