Una mujer de 69 años se convirtió en millonaria la semana pasada luego de ganar en la lotería 594 mil dólares (unos 58 millones de pesos argentinos). Sin embargo, por la insólita y criminal reacción del dueño del local que le vendió el billete aún no pudo cobrar el premio.

Los hechos ocurrieron el pasado 3 de septimbre, cuando la anciana se dio cuenta que una de los dos raspaditas tenía el premio mayor del sorteo "Scratch and Win". Era tal su sorpresa que decidió ir al establecimiento en donde hizo la compra para quitarse la duda

Fue entonces que se dirigió al local, ubicado en el centro histótico de Nápoles, en Italia, y le pidió al dueño que comprobara si efectivamente era la ganadora. El hombre tomó el billete y dijo que debía someterlo a una verificación adicional, pero antes que cualquiera de lo presente reaccione, tomó el casco de la moto y huyó del lugar en su vehículo con el boleto.

La asombrada ganadora no pudo hacer otra cosa que denunciar el robo a la Policía. Mientras tanto, la agencia organizadora de la lotería bloqueó el boleto afortunado, impidiendo de esa forma que el hombre cobre el premio.

Por razones de seguridad, los investigadores decidieron proteger la identidad de la víctima: una circunstancia más que comprensible a la hora de dar a conocer los nombres de quienes ganan grandes sumas de dinero en el juego legal. En ciertos círculos de Italia, de acuerdo a casos recientes, la lotería y el dinero de las apuestas también son tentadores para el crimen organizado.

"Dime que no he perdido ese dinero", repitió la anciana de 69 años que vive cerca del establecimiento donde ocurrieron los hechos, según consignas medios locales. Tras denunciar el robo, la mujer tuvo que ser animada por el personal policíal, y luego por familiares, amigos y conocidos. 

"Carmela (un seudónimo de la víctima) está desesperada -contó una amiga suya- y con ojos brillantes sigue preguntando: '¿Pero lo atraparon? ¿Cuándo devolverá lo que es mío? ¿Por qué me hizo esto?'".

El pasado domingo, el dueño del local fue identificado por la Policía de Fronteras en el aeropuerto de Roma, mientras se disponía a abordar un avión con destino a Fuerteventura, en las Islas Canarias. 

Según indicaron la autoridades, el acusado no tenía el boleto ganador consigo, por lo que aún continúa se continúa con la búsqueda.

Fuente:Crónica TV