Mientras el 70% del comercio, la industria y los servicios en la ciudad La Plata, en sintonía con el aislamiento social, preventivo y obligatorio, cerró sus puertas y estuvo inactivo, Edelap  “estima” los consumos “a su conveniencia” y “mantiene el cobro de contratación de potencia” cuando la actividad está “virtualmente paralizada” desde hace casi dos meses, advirtieron desde la Cámara de Comercio e Industria de la capital provincial.

Los empresarios calificaron como "irresponsable" la actitud de la empresa y aseguraron que atenta contra el “espíritu constructivo y colaborativo” que debe primar “en estas horas tan inciertas en materia económica” que generó la pandemia del coronavirus.  Además adelantarn que en ese contexto analiza la posibilidad de plantear la queja ante la Defensoría del Pueblo de la Provincia.

En paralelo, la entidad demandó un diferimiento en los pagos de las facturas correspondientes a marzo, abril, mayo y junio, sin penalidad ni intereses de financiación, las que serán canceladas durante el primer trimestre del próximo año, teniendo en cuenta aquellos sectores que continuarán con una parálisis total en sus operaciones.

En concreto, los empresarios platenses se quejan porque EDELAP les está enviando facturas con consumos estimados que se asemejan al nivel de utilización de energía que tenían en los meses previos a que se paralizara la actividad a partir de la cuarentena.

La centenaria institución platense que conduce el industrial Juan Carlos Piancazzo, apuntó contra EDELAP por la “insólita y disparatada” decisión, adoptada aún sabiendo que los consumos energéticos “se desplomaron desde el día uno del aislamiento”.

“Saben que no estamos usando la energía, pero igual quieren cobrar como si fuera un período de consumo normal”, disparó Piancazzo. Y se quejó porque al mismo tiempo “facturan la potencia (un componente del cargo que alcanza a los grandes consumidores de energía) cuando ni siquiera prendemos las máquinas”.

A todo esto, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) le reclamó al gobierno nacional que “anule la venta de energía por potencia o en block” a los consumidores que, por motivo de la cuarentena obligatoria, “no pudieron abrir sus empresas o que hayan tenido una baja sustancial en su facturación mensual con la imposibilidad de hacer frente a sus obligaciones”.

La CAC dirigió su reclamo al jefe de Gabinete de Ministros, Santiago Cafiero, al secretario de Energía, Sergio Lanziani, y al interventor del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), Federico José Basualdo Richards, y pidió que las empresas “abonen únicamente la energía consumida, según indique el medidor”, además de “eliminar” las multas en caso de volver a contratar potencia una vez que se decrete la salida de la emergencia sanitaria.

La organización empresaria nacional también reclamó el diferimiento de todas las facturas de luz correspondientes a los meses de marzo, abril, mayo y junio, para que sean canceladas durante el primer trimestre del próximo año, teniendo en cuenta aquellos sectores que continuarán con una parálisis total en sus operaciones.

Fuente: Codigo Baires