Este miércoles se dio inicio al tercer día del juicio por el caso de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado el 18 de enero en Villa Gessel por un grupo de rugbiers. Luego del los testimonios de los padres y amigos de Fernando, continuaron declarando los patovicas del boliche Le Brique, lugar donde se dio el hecho.

El jefe de seguridad del local bailable aseguró que en 20 años de trabajo "nunca vi algo así", haciendo alusión a la violencia que desencadenó en la muerte de Fernando. Además, Alejandro Muñoz, también apuntó a Máximo Thomsen como alguien que "le pegaba con saña" a Fernando.

Thomsen es quien está más complicado de los ocho acusados, ya que habría sido quien le propinó la pisada final a Báez Sosa y arrojó la frase "a este me lo llevo como trofeo".

Pese a todas las pruebas que hay contra Máximo y el resto de sus amigos, Marcial Thomsen, su padre, aseguró que tiene esperanzas porque los testimonios de los amigos de Fernando Báez Sosa "fueron vagos".

Pero luego de la primera parte de audiencia este miércoles, Marcial Thomsen habló con los medios de comunicación presentes en el lugar y aseguró que: "tengo miedo de no verlo más en libertad". Esta declaración generó un fuerte repudio en las redes sociales.