El economista Carlos Melconian consideró que las medidas económicas que anunció el Gobierno, con foco en el tipo de cambio y el gasto público, "se armaron sobre la marcha" e implican "canjear la motosierra por la licuadora".

"Es un ajuste ortodoxo clásico. Más allá de que busca el equilibrio fiscal, primero primario y luego financiero, se ha canjeado la motosierra por la licuadora. La pregunta central de lo anunciado hasta acá es hasta dónde llega la inflación, hasta dónde la recesión", sostuvo el ex presidente del Banco Nación.

A su criterio, "dado el formato de cómo se salió a la cancha, el nivel de improvisación, cómo se llenaron los casilleros, está claro que se armó sobre la marcha".

"Todo eso va a tener costo, pero no debe ni estar pensado cómo sigue", evaluó Melconian, en declaraciones radiales.

Además, comentó: "Creo que ayer se anunció un pedacito, más allá del susto porque la herencia es muy mala. Creo que no se ha cortado con el actual régimen cambiario. El Banco Central se va a involucrar en la deuda importadora y mucho menos en el tema de Leliq. Ahí se metieron en un lío sin necesidad, porque no va a pasar nada".

Para el economista, que formó parte del equipo de la ex candidata presidencial y actual ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, estas medidas "entierran la dolarización".

"No sé si vendrá una modificación para trocar bimonetariedad por dolarización, anoche salió un comunicado del Banco Central para recuperar la demanda del peso. Eso entierra la dolarización", enfatizó.

Luego, confesó sus temores por el impacto en los precios: "Estoy preocupado por la inflación, porque va a venir por arriba de lo que me imaginaba. No imaginaba este saque cambiario".

Por último, afirmó que "tiene que haber una estrategia, un programa". "Sin pasarse de rosca vendiendo espejitos de colores, creo que faltó mostrar una luz al final del túnel, de la estrategia y el programa, que hay un cerebro detrás de esto. Lo comunicacional sin contenido es cháchara, el contenido sin comunicación es incertidumbre", finalizó.

Fuente: Ámbito