Cristina Kirchner regresó de su estadía en el sur del país y se metió de lleno en la agenda de los próximos días. Por primera vez en seis meses, va a compartir un mismo espacio por más de tres horas con Alberto Fernández y ese encuentro requiere toda una preparación previa.

Aunque el diálogo con la Casa Rosada no está roto, el interlocutor por parte del jefe de Estado es con el Secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello. El funcionario, de estrecha confianza de Fernández, es quien tiene el canal abierto con el despacho del primer piso del Senado de la Nación. Con el mandatario no hay más que escuetos intercambios a través de la aplicación Telegram, algo que se volvió cada vez más espaciado desde que éste dijo que está dispuesto a ir por la reelección.

Las dudas respecto de la presencia de la Vicepresidenta surgieron luego de que Cristina Kirchner decidiera quedarse en Santa Cruz y no participar de la sesión preparatoria del Senado en donde se eligieron las autoridades parlamentarias para el 2023. Pero su vuelta a Buenos Aires en las últimas horas despejó cualquier duda.

Este miércoles, alrededor de las 10:30, Alberto Fernández partirá de la explanada de Casa Rosada y se dirigirá por Avenida de Mayo rumbo al Congreso de la Nación donde estará CFK esperándolo en las escalinatas para, como dicta el protocolo, recibirlo en la previa al discurso de la Asamblea Legislativa que da inicio a las sesiones ordinarias del 2023.

En la previa se formalizará las designaciones de las dos comisiones que recibirán al Presidente y cerca de las 11.30 se pasará a un cuarto intermedio para esperar que el jefe de Estado concluya el trayecto que realizará por Avenida de Mayo.

Una vez que lo reciba y firme el libro que marca el ingreso del mandatario al Palacio Legislativo, saludarán a la delegación de diputados y senadores que los estará esperando y se retirarán al despacho de la presidenta de la Cámara baja, Cecilia Moreau.

Ese momento será el primero en que ambos mandatarios podrán estar solos, si es que así lo desean, y será la primera vez que se verán cara a cara desde el pasado 2 de septiembre, un día después del intento de magnicidio, cuando Fernández visitó a Cristina Kirchner en su casa de Recoleta.

Otra característica que tendrá este miércoles es la presencia en el recinto de Máximo Kirchner, quien no participó el año pasado de la apertura de sesiones ordinarias. “Está confirmado que él estará en su banca y “Wado” de Pedro -el ministro del Interior- en el palco de los invitados”, aseguraron en el entorno de quien supo ser el presidente del bloque de diputados los primeros dos años de gestión del Frente de Todos. Junto al ministro también se podrá ver al gobernador Axel Kicillof, por lo que el kirchnerismo tendrá buena presencia.

Máximo Kirchner dirá presenta en la Asamblea Legislativa (Télam)
Máximo Kirchner dirá presenta en la Asamblea Legislativa (Télam)

Según pudo reconstruir Infobae, el discurso del Presidente de la Nación tendrá un apartado al ítem judicial, no sólo por la investigación que está llevando adelante la Comisión de Juicio Político respecto del accionar de los cuatro jueces de la Corte Suprema de Justicia, sino también respecto de la situación procesal de la Vicepresidenta de la Nación. En la Casa Rosada aseguran que Fernández insistirá con la inocencia de Cristina Kirchner y no hará referencia a la idea - con la cual no comulga - de la proscripción.

Este capítulo del discurso, que contendrá un repaso de la gestión y sus logros, es el que hace que por ahora los cuatro miembros del máximo tribunal -Horacio Rosatti, Carlos Fernando Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti - no hayan confirmado su asistencia al recinto.

Cristina Kirchner y Alberto Fernández compartirán por última vez el recinto. Lo harán en un clima de máxima hostilidad. Tanto desde el bloque del Frente de Todos, que se divide entre los kirchneristas que se muestran molestos con el Presidente y los peronistas críticos del kirchnerismo, como desde Juntos por el Cambio, que aún está decidiendo qué van a hacer una vez que estén el recinto y se sientan criticados en el discurso presidencial.