El paradero de Brian Fernández es un misterio. El futbolista, que actualmente hace parte del plantel de Colón, lleva desaparecido hace una semana, faltó a dos entrenamientos y en las últimas horas hallaron un auto abandonado que parecería ser del delantero.

El vehículo se halló en las inmediaciones de calle Peñaloza y Doldán, en el barrio Altos de Noguera en Santa Fe, un auto coupé importado. El mismo tenía vidrios rotos, le faltaba un espejo y un neumático.

 

¡URGENTE! Misteriosa desaparición del futbolista Brian Fernández: hallaron su auto destruido


Según las autoridades, el auto podría ser del delantero de Colón, de quien no se tienen noticias desde la semana pasada, cuando se conoció que no había asistido a las prácticas. A finales del mes de febrero y con la llegada de Pipo Gorosito al plantel sabalero, se decidió darle una nueva oportunidad al delantero tras haber atravesado una recaída en su problema de adicciones y haberlo superado una vez más.

Antes de enfrentar a Independiente por la Liga Profesional, Pipo Gorosito brindó una conferencia de prensa en la que fue consultado por la situación de Brian Fernández. El técnico fue tajante y explicó que el exdelantero de Racing no sería tenido en cuenta y que deberá acordar su continuidad con los dirigentes.

“Faltó a dos entrenamientos. No tenía permiso. Le dije que le daba una oportunidad y le di dos... ya está. Tiene que hablar con la gente del club para ver cómo sigue. Yo no soy psicólogo, le debo dar prioridad al grupo”, explicó el exentrenador de Gimnasia el viernes, después de que el jugador no participara de ninguna de las dos últimas prácticas.

Además, Gorosito fue claro al asegurar que él tuvo la intención de darle posibilidades al futbolista, pero fue él quien las dilapidó: “Le pasó muchas veces. Hablé con él como padre, como pibe de barrio que también es. Es un tema que debe resolver él. No puedo decir algo para lo que no estoy capacitado”.

Fernández regresó a Colón en febrero de este año, después de que en octubre de 2022 había sido arrestado en el barrio Yapeyú de Santa Fe por arrojarle piedras a un colectivo. Luego de ese episodio, fue hospitalizado en el Hospital Iturraspe con “un cuadro de salud mental agudo, un brote psicótico”.

Tras iniciar un tratamiento, volvió al Sabalero con sed de revancha: “Estoy bien, tengo muchas ganas de revertir la situación”, expresó en aquel entonces en diálogo con TyC Sports. “Jamás quise lastimar a nadie. Es un problema personal que tengo que luchar día a día y trato de mejorar para hacerlo mejor, pero jamás les quise hacer un daño a los hinchas”.

Fuente: Diario de Cuyo