Una vez más, las patronales de “el campo”, creyéndose dueños del país, no sólo ratificaron su rechazo a cualquier instancia de diálogo con el Gobierno, sino que volvieron a poner el pie en el acelerador y en lo que bien podría ser una clara señal de declaración bélica, hoy arrancaron con un lockout (hasta el 28 de mayo) de todas las categorías de hacienda vacuna en rechazo al cierre de exportaciones de carne anunciado por el Gobierno nacional, para intentar contener la suba de precios en el mercado interno.

Como si fuera poco, y fiel al estilo patoteril y agresivo que caracteriza a no pocos de los grandes productores, hoy Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), amenazó con que “si el Gobierno no da marcha atrás con el cierre de las exportaciones, desde el lunes o martes próximos se sumará a la medida de fuerza un cese de comercialización de granos”, en solidaridad con los exportadores de carne.

“Si no se levanta (el cepo para exportar), la semana que viene se incorporan los productores de granos”, anunció el dirigente ruralista quien, para despejar cualquier duda sobre cómo se manejan en ese universo, aseguró que “ya está casi decidido”.

En esa misma línea, y a través de virulentas expresiones, en las que exteriorizan la carga de odio que caracteriza a ese sector cuando se trata de enfrentar a la administración del Frente de Todos, los integrantes de la llamada Mesa de Enlace salieron con los tapones de punta contra la medida adoptada por el Gobierno.

Uno de ellos, Daniel Pelegrina, titular de la Sociedad Rural, destacó que se recibió el apoyo de la cadena de la carne para la medida de protesta, y de manera hipócrita dijo que “nuestra decisión no es afectar a nadie, es reclamar por nuestro futuro”. Y consideró que “se nos utiliza para tapar otros problemas (…) hay disputas de poder, una línea interna del Gobierno a la que no le gusta el campo, y es la que viene primando, la línea del kirchnerismo”.

En medio de este clima bélico, motorizado justamente por los dirigentes de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Federación Agraria Argentina (FAA) y Sociedad Rural Argentina (SRA), hoy el diario Página/12 dio a conocer el contenido violento que se desprende de los grupos de Whatsapp que nuclean a los representantes del “campo” más ultra.

“Hay que dejar de pagar todos los impuestos, ni el IVA tenemos que pagar”, disparó un productor de la Pampa, en uno de esos grupos que reúnen a ex dirigentes del PRO, financistas de la campaña de Mauricio Macri y funcionarios de las Sociedades Rurales de todo el país, que interactúan con propuestas de rebeldía a las decisiones de los Estados que, en este caso, se matizan además con consignas políticas.

De todas maneras, la decisión del Gobierno Nacional de cerrar por 30 días las exportaciones de carne para tratar de acomodar los precios del mercado interno, tuvo en el agro unanimidad en el rechazo, pero con una diferencia sustancial que es parte de la interna que se desató en el último año y medio en el sector: las maneras de reaccionar ante decisiones del Estado.

Por un lado, aparecen la Mesa de Enlace y los productores de carne fieles a la idea de un lock out duro de una semana; y por otro, los negociadores del Consejo Agroindustrial (CAA) con el mismo malestar, pero canalizado en la necesidad de sentarse con el Gobierno para negociar soluciones alternativas.