El ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, defendió este miércoles la división del Frente de Todos en el Senado para ganar un lugar en el Consejo de la Magistratura. “Lo que el peronismo ha hecho no es ilegal. Tiene todo el derecho del mundo de llevar a la práctica como le parezca”, sostuvo.

Fernández sostuvo, además, en diálogo con C5N, que “el formato” que encontró la Corte Suprema para resolver la conformación del Consejo de la Magistratura “es inexplicable”. “La Corte puede tomar decisiones para declarar la inconstitucionalidad de una norma, más no puede 16 años después reponer una ley que ya había sido derogada por el Congreso”, consignó.

Y amplió: “La Corte no está para hacer jugadas políticas, como es un poder de la República, es necesario que tenga su poder político, y la realidad indica que solo lo tiene cuando conquista prestigio entre los otros poderes, que es exactamente lo que está sucediendo”.

El titular de la cartera de Seguridad consideró que “ni siquiera es un conflicto de poderes” y sostuvo que “es un hecho inconcebible desde todo punto de vista” al analizar el funcionamiento del Consejo de la Magistratura.

“[La Corte] no puede sancionar en ninguna condición, mucho menos en ésta, con lo cual asumir que tiene validez lo que el Congreso derogó hace 16 años es una locura. Pero esa locura estaba enmarcada dentro de un beneficio para varios”, manifestó.

En esa línea, apuntó contra el radicalismo. El funcionario de Alberto Fernández dijo que los dirigentes de ese espacio, que impulsaron a Roxana Reyes como representante en el organismo, “flaco favor y respeto le hacen para su propia historia”.

“Debieran recordar que una Corte de estas características un 10 de septiembre de 1930 convalidó el golpe de estado contra Hipólito Yrigoyen”, recordó Fernández. Y citó que fueron los jueces Antanio Sagarna, Roberto Repetto, Ricardo Lavalle, y José Figueroa Alcorta quienes firmaron ese fallo.

“[Esa Corte] sacó una acordada que le dio validez al primer golpe de estado que tuvimos los argentinos y fueron los radicales los lastimados”, insistió. Y agregó: “Y parece ahora que miran para otro lado, que estas cosas les satisfacen. Es un horror lo que pasó”.

El funcionario insistió en sus críticas al máximo tribunal. “Me parece que imponerle a todos los argentinos una situación tan desagradable, tan horrorosa en términos del derecho que nos obliga a tener que pensar y reflexionar sobre lo que pueden significar estos gestos a futuro, entonces no tiene límites, si van a a hacer lo que se les antoje”.