El exfiscal federal Federico Delgado se refirió en la tarde de este domingo al caso Nisman y señaló que “la palabra judicial está sospechada”. Además, su opinión respecto a los cambios en la Justicia anunciados por el Presidente de la Nación, Alberto Fernández. “La Justicia es muy dura con los pobres y muy benevolente con los fuertes”, afirmó.

Al referirse al caso Nisman, el exfuncionario judicial apuntó que “el documental tiene algo que para mi es trágico. El informe de Netflix escucha a muchas personas pero naturalizamos los vínculos de la Justicia con los servicios de inteligencia, la política, los empresarios. Eso explica que necesariamente el producto judicial convive con una sospecha de nacimiento”.

En tanto, respecto al anuncio del Gobierno Nacional respecto a una “revisión”, Delgado indicó que “no creo que Sabina Frederic esté por revisar la pericia. Lo que leí es que se revisen los protocolos internos de las fuerzas de seguridad para ver si hubo manipulaciones en el diseño del acto, no el acto en sí mismo. Eso me parece bien. Arroja transparencia, arroja credibilidad, arroja verdad porque me parece que lo que hay que reconstruir es la verdad de la palabra pública”.

“Hoy diga lo que diga Julián Ercolini o el fiscal Eduardo Taiano, una mitad lo va a creer y la otra no porque el problema mayor es que la palabra judicial está sospechada y eso nos atrapa a todos”. Asimismo, agregó que “hay falta de responsabilidad y ausencia de franqueza porque todo el mundo se agarra de un pedacito para colar su interés por ahí”.

Por otro lado, consultado sobre los cambios en la Justicia que anticipó el Presidente, Alberto Fernández, Delgado consideró que “el discurso en la Asamblea Legislativa tuvo un diagnóstico que me parece que es correcto. Ahora, me parece que es tratar de plasmar eso en la realidad. Toda iniciativa genera resistencia”. Y remarcó que “en la Justicia hay mucha gente buena pero tiene un drama que es muy dura con los pobres y muy benevolente con los fuertes. Eso hace que haya impunidad y presiones injustas. Basta con ir a las cárceles para verlo”.

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