Matías Martínez (25), el imputado por el femicidio de Úrsula Bahillo (18), fue trasladado este miércoles a la comisaría de la localidad de Conesa, a unos 75 kilómetros de Rojas. Pero la reacción de los vecinos de ese pueblo ante la presencia del detenido obligó a las fuerzas policiales a adelantar su traslado hacia un penal bonaerense para apaciguar la protesta.

Alrededor de las 18, vecinos de Conesa comenzaron a concentrarse frente al destacamento con carteles y redoblantes, y exigieron “cárcel” para Martínez. “Todos somos Úrsula”, “Justicia para Úrsula” y “Ni una menos”, fueron las frases en la mayoría de pancartas.

El informe preliminar de la autopsia –que se conoció hoy– reveló que Úrsula fue asesinada de al menos 15 puñaladas en la espalda, torso y cuello. Mientras tanto, la Justicia de Garantías convalidó la imputación por femicidio de Martínez con los agravantes de “alevosía” y “ensañamiento”.