“No pude defenderme”, aseguró Hernán Cuevas, uno de los actores de División Palermo, la exitosa serie de Netflix, sobre una situación que padeció cargada de agresión y homofobia. "Ayer me tomé un auto en una aplicación, porque llegaba tarde, y el chofer observó que yo tenía un pin con una bandera LGTB", inició el relato del actor, que contó como un simple viaje terminó transformándose en una pesadilla.

El discurso de odio del chofer genera escalofríos: "Empezó a hablarme de su religión, la persona era evangelista. Yo no pude decir nada, no pude defenderme, solamente empezó a decirme en ese viaje que era un pecador, que me amaba pero que era un pecador por lo que hacía, que me iba a ir al infierno, que el diablo me hablaba por mi oreja para hacer esas cosas, que él hablaba con Dios y el Espíritu Santo le hablaba... pero más allá de su discurso de religión, fue su juicio de valor en decirme que yo estaba mal y que no podía hacer mi vida porque no era lo que Dios me había mandado".

"Y es más, en un momento me dice 'yo te vi, cuando entraste al auto, que tenés un cuerpo distinto. Seguramente te lo mandaron porque tenías una misión que cumplir con ese cuerpo'. Fue un viaje muy horrible y la verdad es que no pude defenderme. Me sentí atacado, vulnerable, desprotegido, no pude defenderme, no pude decir nada, y es triste vivir así, que alguien me juzgue por mi condición o mi elección. Es una mierda, sinceramente. Lo quería compartir porque no me sentía muy bien", agregó sobre la agresión que también sufrió por su baja talla.