Flor de la V se encuentra en Catamarca, donde este fin de semana se presenta en el marco de la gira nacional de la obra Tres empanadas. Allí, aprovechó el buen clima de este sábado para recorrer la ciudad y visitó la Catedral de la Virgen del Valle, a quien considera “muy milagrosa”. Y, en un alto, brindó una entrevista radial en la que no se privó de opinar sobre los hechos más salientes de los últimos tiempos.

Consultada por Catalina Dlugi, en su ciclo radial Agarrate Catalina, la actriz se mostró feliz por la repercusión de la obra que protagoniza junto a Juan Pablo Geretto y Flavio Mendoza y también por su rol de panelista en A la tarde, junto a Karina Mazzocco, Cecilia “Caramelito” Carrizzo y Débora D’Amato. “No es fácil ser panelista, sobre todo cuando ya tenés un nombre”, analizó. “Cuando estaba en Los ángeles de la mañana no sabía desde qué lugar tenía que hablar... Y hoy me pasa que ya lo tengo claro; no es que opino como en mi casa, estoy en un programa donde se debaten temas y tengo que hablar y dar mi posición. Después, si lo sacan de contexto, es otra cosa. Yo lo disfruto”, agregó.

La conductora, entonces, hizo referencia a uno de los temas tocados en el programa esta semana: la llegada de Lionel Messi y su familia a Francia. “En el programa, aportaste tu mirada particular, de cómo Antonella Roccuzzo le sacaba la coronita a Wanda Nara”, observó Dlugi. “Y lo que generó... Fue un tema bastante importante, porque ya supimos lo que pasaba entre todas las mujeres de los futbolistas en el Mundial de Brasil. ¡Y Antonella es la reina de las botineras!”, aseguró la actriz.

Y continuó: “Igual, viste que al final la empezó a seguir a Wanda en las redes, a pesar de que ella es íntima amiga de Evangenlina Anderson, que está peleada a muerte con Wanda. Antonella es una reina consorte bastante diplomática”.

“Tiene convicciones muy firmes y no tiene ningún tipo de archivo, no es como las otras”, disparó, sin filtro. “De las demás, son muy pocas las que no tienen archivo. Wanda y Evangelina tienen un tendal atrás”, agregó.

Dlugi, entonces, le recordó que no había tenido empacho en catalogar de “tilinga” a Viviana Canosa cuando se declaró en contra de la implementación de un“pasaporte sanitario”. “Es que ella tiene siempre posturas provocadoras. Es lo mismo que hacía con los chimentos, pero ahora llevado más a la política. Utiliza los mismos recursos, pero ahora se disfraza de mujer de derecha”, aseguró.

Y analizó: “Es una postura que le conviene, porque así genera un rebote mediático, y hay una buena parte de la sociedad que piensa como ella”.

Luego, a propósito de su reciente visita en la obra Bendito tú eres, protagonizado por Sergio Goycochea y un nutrido grupo de transformistas, De la V recordó sus inicios en el mundo del espectáculo: “No sé si soñaba con el éxito... En ese momento, disfrutaba de lo que tenía, de poder trabajar de lo que me gustaba, que era el arte, y de no tener que exponerme al trabajo sexual. Entonces, el hecho de no tener que estar en la calle, y tener la posibilidad de subir a un escenario ya me bastaba. Yo hice de todo. Empecé haciendo desfiles en boliches y de la noche a la mañana debuté en el teatro Tabarís, reemplazando a Cris Miró. Y a partir de ahí, cambió mi vida para siempre”.

“¡La primera nota me la hizo el Teto Medina en Indiscreciones en el año 95! Era una época muy dura porque no podías andar por la calle; te metían presa, te golpeaban, entrabas y no sabías cuándo salías. Yo tuve la suerte de no pasar por eso, y creo que tiene que ver con que al poco tiempo de estar acá, debuté en el teatro y, automáticamente, ya me volví conocida y eso de alguna manera me volvió ‘intocable’ y me empezaron a respetar”, rememoró.

Fuente: La Nación