El inspector General de Justicia (IGJ), Ricardo Nissen, denunció este lunes que José Aranda, uno de los dueños de Clarín, intentó registrar una sociedad offshore en Argentina con un fondo de casi 2.500 millones de pesos, pero sin explicar su origen. Además, cuando la IGJ rechazó el pedido e inició un investigación por posible lavado de dinero, fuga y evasión, un fallo judicial impidió que se lo investigue y le allanó el camino para que se registre en otra jurisdicción provincial.

Según, Nissen, este acto fue en complicidad con la Sala C integrada por Julia Villanueva y Eduardo Machin. Esta sala emitió el fallo que convalidó el rechazo de la inscripción de la sociedad de Aranda y también impidió que la IGJ, el Banco Central, la UIF y la AFIP investiguen el origen de los fondos del accionista de Clarín. El funcionario, dijo que el argumento de la Cámara fue que si ya se rechazó su inscripción no se debía investigar a la sociedad.