“Me calificaría con un 8”, respondió la ministra al ser consultada en una entrevista con CNN Radio, al tiempo que negó que se emplee la “mano dura” y afirmó que la política de su cartera se centra en “ser firmes contra el delito y cercanos a la gente”.

“Antes de que llegáramos, había una política que no introducía a la víctima ni a la ciudadanía como elemento fundamental, y estaba basado todo en los derechos del delincuente. Ahora hay un equilibrio, con una política que algunos quieren llamar ‘mano dura’, pero es mucho más simple. Se hace lo que hay que hacer, no vivir en el mundo del revés”, explicó.

La ministra se mostró confiada en que “se le puede ganar a la inseguridad” y aseguró que “con buenas prácticas y cambiando muchas leyes los homicidos bajaron un 21 por ciento y los robos, un 8”. No pasa lo mismo con las cifras de femicidios que “se mantienen estables”.

Fuente: info135.com.ar