“Estoy de acuerdo, tenemos que debatir el manejo de lo migratorio en el país. La Argentina es un país de una generosidad absoluta, pero a veces somos demasiado generosos y abiertos frente a otras realidades”. Con estas palabras, Mauricio Macri se sube a la ola de aquellos que plantean un endurecimiento de las leyes migratorias, que se desató en los últimos días.

En la ciudad cordobesa de Río Cuarto, y acompañado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y de Producción, Dante Sica, el presidente destacó hoy que “en esta Argentina que madura todo tiene que ser debatido, no tenemos que tener miedo de ver cómo son las reciprocidades”.

Al respecto, Macri propuso a sus legisladores en el Congreso que evalúen “cómo son las reciprocidades” con otros países de la región en materia de política migratoria.
Y agregó: “Tenemos que replantearnos también qué estamos haciendo, y poner como eje que queremos gente que venga con la vocación de trabajar, como nuestros abuelos cuando vinieron a este país, y protegernos frente a otras intenciones”.

Siguiendo esa línea, sostuvo: “Queremos gente que venga a hacer su aporte y tratar de protegernos de otros que vienen con otro tipo de intenciones que realmente nos complican la existencia a todos y le generan un gran trabajo a la ministra Bullrich. Por eso creo que todos tenemos que estar alertas de qué manera nos queremos manejar”.

La semana pasada, tras la detención de cuatro extranjeros en los incidentes frente al Congreso en medio del debate por el Presupuesto 2019, el senador Miguel Pichetto introdujo en la agenda pública el debate sobre una nueva ley de migraciones. El oficialismo adelantó que tiene la intención de impulsar reglas más duras para el ingreso al país.

El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y Bullrich, defendieron la expulsión “inmediata” de esos cuatro extranjeros, a pesar de que no hay imágenes ni testimonios que los vincules con los episodios de violencia.

En enero de 2017, Macri emitió un decreto de necesidad y urgencia que restringe las condiciones de permanencia e ingreso de extranjeros al país. La resolución fue declarada inconstitucional por la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal en marzo de este año.

En tanto, el propio decreto y la ley de Migraciones sancionada en el Congreso en diciembre de 2003 prohíben la expulsión inmediata de inmigrantes, según advierten organismos de derechos humanos como el Centro de Estudios Legales y Sociales, Amnistía Internacional y la Comisión Argentina para Refugiados y Migrantes.

Fuente: info135.com.ar