AMIGOS SON LOS AMIGOS: Gracias al Macri, Boca recibió más de $ 37 millones... del PAMI!!!

Una nota de La Izquierda Diario de febrero de 2017 denunciaba que, aunque las prestaciones que brinda el PAMI a personas de la tercera edad son cada vez más deficientes e insuficientes por falta de presupuesto, el extitular de la institución, Carlos Regazzoni, realizó convenio para beneficiar al Boca Juniors de Angelici: $ 37.825.360,75 para financiar al club en concepto de “formalizar acciones de cooperación y asistencia institucional, en el marco de las misiones y funciones que les son propia”. ¿Qué significa eso? Ni siquiera los egiptólogos que descifraron los jeroglíficos de la famosa “piedra Rosetta” pueden traducirlo.

El extraño acuerdo se rubricó el 29 de septiembre de 2016 y todavía se desconoce cuál fue el uso que le dio Boca a esos fondos otorgados por PAMI.

“El contrato entre Boca y el PAMI es una vergüenza más dentro de las tantas que se vienen dando en el organismo en los últimos años”, declaró al diario platense Hoy el defensor de la tercera edad, Eugenio Semino. El funcionario anunció que iniciarán acciones penales desde la Defensoría porque “Queremos que se acabe toda esta clase de convenios espurios y a espaldas de los reales beneficiarios del PAMI, que son los jubilados”, explicó.

La única “pista” que ofrece el convenio –establecido con una duración de dos años- es que su fin sería “impulsar actividades afines tendientes a profundizar la articulación de ambas instituciones”. Tal vez en ese marco se entienda el papelón de la lamentable “donación” realizada por la Peña Pinamar de Boca al Centro de Jubilados de esa localidad: una silla de ruedas de plástico (¡!) entregada por el Vicepresidente de Boca, Royco Ferrari, y anunciado con total desparpajo en el sitio web oficial del club de la Ribera.

En declaraciones al diario Hoy, el abogado especialista en derecho previsional Christian D’Alessandro evaluó que como “el socio de Macri es Angelici, que el PAMI le esté dando un convenio a una entidad que conduce este es cuanto menos dudoso”. “Se hacen grandes negocios a costa de la vida y la muerte de los jubilados”, concluyó.

Independientemente de los actos de presión a árbitros y organismos disciplinarios del fútbol, Angelici contaba con otra “ayuda” que está a la vista y a la luz del día: un contrato de financiación por parte de una entidad en crisis aguda y vaciada al borde del saqueo. El PAMI, nada menos.


Fuente: La Izquierda Diario