El bailarín Flavio Mendoza se quejó de cómo la crisis económica afectó sus propio espectáculo. Además, reconoció que tiene miedo por lo que pueda llegar a pasar con la situación social.

El coréografo contó que le lleva mucho esfuerzo poder sostener su circo: “Me encantaría que el país mejore porque el argentino es de salir. Somos el único país en el mundo que tiene temporada de verano teatral con Mar del Plata y Carlos Paz. De hecho, este verano llevo al circo a Mendoza porque quería salir del circuito para después ir a Chile y Paraguay”, indicó en una nota radial con "Cosas de Minas" (La Salada).

“Mantener ese circo, con toda esa gente, en nuestro país es tan difícil… yo a veces me quejo: para abrir la función en Puerto Madero vienen diez inspectores cada día y yo no lo puedo creer. Hay cada cosa que pasa. Loco, le estoy dando trabajo a un montón de gente y es como que te ponen el palo en la rueda”, expresó.

A su vez, afirmó estar “asustado” por la situación del país aunque remarcó la decisión de seguir peleando: “a mí no me importa quien seas (en cuanto a la orientación política de quien esté en el poder), quiero que realmente alguien nos gobierne bien. En nuestro país hay gente que se muere de hambre y eso es lo que me angustia. Tengo un amigo que trabaja en PAMI y me cuenta los meses que demora un estudio, capaz esa persona no llega viva. Ese tipo de cosas deberían ser un derecho”.

El bailarín Flavio Mendoza se quejó de cómo la crisis económica afectó sus propio espectáculo. Además, reconoció que tiene miedo por lo que pueda llegar a pasar con la situación social.

El coréografo contó que le lleva mucho esfuerzo poder sostener su circo: “Me encantaría que el país mejore porque el argentino es de salir. Somos el único país en el mundo que tiene temporada de verano teatral con Mar del Plata y Carlos Paz. De hecho, este verano llevo al circo a Mendoza porque quería salir del circuito para después ir a Chile y Paraguay”, indicó en una nota radial con "Cosas de Minas" (La Salada).

“Mantener ese circo, con toda esa gente, en nuestro país es tan difícil… yo a veces me quejo: para abrir la función en Puerto Madero vienen diez inspectores cada día y yo no lo puedo creer. Hay cada cosa que pasa. Loco, le estoy dando trabajo a un montón de gente y es como que te ponen el palo en la rueda”, expresó.

A su vez, afirmó estar “asustado” por la situación del país aunque remarcó la decisión de seguir peleando: “a mí no me importa quien seas (en cuanto a la orientación política de quien esté en el poder), quiero que realmente alguien nos gobierne bien. En nuestro país hay gente que se muere de hambre y eso es lo que me angustia. Tengo un amigo que trabaja en PAMI y me cuenta los meses que demora un estudio, capaz esa persona no llega viva. Ese tipo de cosas deberían ser un derecho”.

Fuente: El destape