Waldo Wolff, el diputado macrista que preside (aún hoy) la Comisión de Libertad de Expresión, mintió. Dijo que nunca denunció a los periodistas de El Destape por haber publicado información que compromete a Mauricio Macri en el entramado de espionaje ilegal desatado durante su Gobierno. Pero la lectura de la denuncia revela que Wolff faltó a la verdad, que pidió que se investigue y procese a los periodistas y al dueño de este medio por publicar información incómoda para su jefe político y hasta inventó supuestas pruebas y escritos judiciales.

Luego de que Clarín difundiera la presentación judicial contra los periodistas de El Destape, el diputado Wolff afirmó en su cuenta de Twitter que solo había denunciado a Cristina Caamaño, interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), al juez Juan Pablo Augé y a los fiscales Cecilia Incardona y Santiago Eyherabide.

“En ningún lugar de la denuncia habla de denunciar a nadie más”, dijo Wolff, y agregó: “No hay periodistas denunciados”. Es mentira.

La denuncia dice textual: “Corresponde analizar la responsabilidad de los periodistas y las autoridades de dicho medio de comunicación, por otorgar difusión pública a datos a los que accedieron en función de su profesión y cuyo secreto tenían obligación de guardar”. ,La presentó Wolff junto a los diputados Fernando Iglesias, Jorge Enríquez y Álvaro de Lamadrid. Éste último también integra la Comisión de Libertad de Expresión que preside Wolff.

El pedido de que se analice “la responsabilidad de los periodistas y autoridades de dicho medio de comunicación” aparece a párrafo siguiente de que Wolff y sus secuaces enumeren las notas de El Destape y las cataloguen como delitos. Piden las sanciones de los artículos 222 y/o 223 del Código Penal, que están en el capítulo de Delitos contra la Seguridad de la Nación, y que prevén de 1 a 6 años de prisión.

No es la única parte donde denuncia a este medio y sus periodistas.

Como en cualquier denuncia, el escrito presentado por Wolff en Comodoro Py propone las calificaciones jurídicas de los delitos que incrimina. Y allí vuelve a incluir a los periodistas y al dueño de El Destape. Dedica varios párrafos a señalar supuestos delitos de la interventora Caamaño y luego remata: “También actuaron con plena voluntad los periodistas Mizrahi, Lijalad y Navarro que, habiendo accedido a documentación e información cuyo carácter secreto resultaba evidente, la publicaron y pusieron a libre disposición del público en Internet”.

Además de engañar cuando afirmó que no denunció a periodistas, Wolff mintió dentro de la denuncia.

Como ya explicó El Destape, nunca se puso el libro de Actas de la AFI a “libre disposición del público en Internet”. De eso se ocuparon Clarín y otros medios -tal como da cuenta la propia denuncia- que no fueron denunciados por el macrismo, una muestra evidente de la persecución ideológica contra El Destape y sus periodistas.

Pero Wolff incluso inventó pruebas.

En la página 35 de la denuncia Wolff afirma que El Destape primero publicó actas de la AFI “sin testar” en un link que luego fue retirado y cambiado por otro donde sí aparecían esos documentos con tachaduras. Y denunció también que esto lo habían remarcado los fiscales Incardona y Eyherabide cuando solicitaron que se retire esa documentación del sistema de acceso de todos los abogados en la causa por espionaje ilegal. Las dos afirmaciones son falsas.

Wolff inventó el link donde supuestamente El Destape publicó las actas de la AFI sin testar. Pero además dijo que “el link consta en la presentación que los Fiscales realizaron ante el Juez para que retire la documentación del sistema informático del Poder Judicial”. La imagen de la presentación de los fiscales lo desmiente.

Fuente: El Destape