Según un sondeo de la consultora Datafolha, Lula da Silva amplió hasta 14 puntos la diferencia con Jair Bolsonaro. Esta información reaviva las intenciones de transformarse en el nuevo presidente del país vecino sin la necesidad de pasar por un balotaje, debido a que podría alcanzar el piso mínimo necesario para evitarlo.

Los resultados avisan que podría ganar Lula en primera ronda.

Según informan, la intención de voto de Lula subió del 45% al 47% en comparación a lo que se sabía la semana pasada, una brecha importante contra el 33% que mantiene su rival político. De esa forma, el expresidente reuniría el 50% del apoyo, si se cuentan los votos válidos, o sea, aquellos que no están en blanco o fueron anulados.

Según comentan los analistas políticos, el aumento de Lula en las encuestas viene de la mano de malas jugadas políticas que realizó Bolsonaro como su viaje al funeral de la reina Isabel. Igualmente, el actual mandatario sigue con su campaña para desacreditar a las encuestadoras, las cuales afirma que están pagadas por sus enemigos y por los medios de comunicación para poder sacarle peso político, ya que, según el, su verdadero apoyo se encontraría en las calles.

Bolsonaro desestimó las encuestas.

No obstante, no todos los analistas están seguros de que Lula logre consagrarse como presidente en primera vuelta. Según un informe publicado el jueves, los economistas Alberto Ramos y Renan Muta afirmaron que “los votantes parecen haberse decidido sobre su voto mucho antes que en elecciones anteriores: ha habido inusualmente pocos indecisos desde mediados de 2021”, algo que les señala a ellos que la base política del exmandatario tiene tasas de abstención “comparativamente más altas” a las de su contrincante.

Lula se reunió con un enviado de Biden

Durante la semana, el dirigente del PT se juntó en un hotel de San Pablo con Douglas Koneff, la principal autoridad de la embajada de Estados Unidos en Brasil. La reunión, que duró dos horas, fue vista por Lula como un gesto de Biden respecto a las posibilidades de que se transforme en presidente electo a partir de las elecciones de este 3 de octubre.

Lula se reunió con Douglas Koneff, la principal autoridad de la embajada estadounidense en Brasil.

"El diálogo siempre es importante y, obviamente, Estados Unidos es central por nuestras relaciones comerciales. Ellos deben tener interés en conversar debido a la perspectiva de victoria de Lula”, afirmó a los medios Gleisi Hoffmann, la actual presidenta del Partido de los Trabajadores.