La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación presentó una denuncia penal ante la justicia porteña contra el Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta y contra Diego Santilli, a cargo del Ministerio de Justicia y Seguridad, por la represión ocurrida durante el velorio de Diego Maradona por parte de la Policía de esa ciudad.

Además, la denuncia aclara que el gobierno nacional no dio ninguna orden de reprimir ni despejar ni detener a persona alguna y hace responsable directamente a las fuerzas policiales del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. En total, la policía de la Ciudad detuvo a 11 personas imputadas presuntamente por “resistencia a la autoridad”, de las cuales 9 ya fueron liberadas. En la denuncia, que fue presentada esta tarde, se solicita que se investigue a las máximas autoridades del Gobierno de la Ciudad por los delitos de intimidación pública, abuso de autoridad y abandono de persona (artículos 211, 248 y 106 del Código Penal) por el violento accionar llevado adelante por efectivos policiales. La presentación incluye un compilado de imágenes que prueban la represión violenta y desmedida.

Desde el gobierno porteño aseguraron a El Destape que “la organización integral del velatorio en la Casa Rosada y sus respectivos ingresos estuvo a cargo del Gobierno Nacional”. Desde el entorno de Horacio Rodríguez Larreta se defienden bajo el argumento de que “el operativo de seguridad estaba bajo el Comando Unificado (PFA, GNA, PSA, PDLC) a cargo del Gobierno Nacional, que da instrucciones a la Policía de la Ciudad y el resto de las fuerzas”.

Mientras que desde el Ministerio de Seguridad de la Nación indicaron a este medio: "Era un operativo de Ciudad. Nosotros dimos apoyo en la zona de la Casa Rosada”. Y señalaron que los incidentes principales empezaron en una zona que era de exclusiva jurisdicción de la Ciudad. En un comunicado, desde la cartera que conduce Sabina Frederic fueron contundentes: “Deslindamos de responsabilidad a las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales de los incidentes registrados, debido a que los mismos han sido generados por la policía de la CABA”. “Si algún miembro de las fuerzas federales hubiera ejercido algún acto contrario a las órdenes dadas por esta cartera será investigado, sumariado y puesto a disposición de aquello que determine la investigación que se le inicie”, añadieron.

El escrito señala que esas imágenes reunidas no permiten suponer que los abusos policiales hayan sido desvíos individuales de algunos miembros de la fuerza porteña. “La sistematicidad en el accionar y la violencia cometida por todos ellos da cuenta de una orden superior que dispuso la represión de esa forma: con balas de goma, gases, camiones hidrantes y detenciones arbitrarias”.

Ayer, el subsecretario de intervención federal del Ministerio de Seguridad de la Nación, Luis Morales, apuntó directamente contra la gestión porteña por el caos que se produjo tras la intervención de la policía de la Ciudad en aquella zona: “Por supuesto que no ordenamos la represión”, dijo Morales en diálogo con Radio con Vos. “La jurisdicción donde empezaron los incidentes fue 9 de julio y Avenida de Mayo. En esos incidentes participó la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. Es jurisdicción del gobierno de la Ciudad”, explicó en el programa Pasaron Cosas.

El funcionario continuó con su relato: “Una vez que se produjeron los incidentes en 9 de julio y Avenida de Mayo hubo un desbande”. Los desmanes llegaron a la Casa Rosada, lo que derivó en el cierre del ingreso a la Casa de Gobierno, donde la seguridad estaba en manos de la Casa Militar. Tal fue el caos que se debió reubicar el féretro en otro salón del edificio gubernamental.

Fuente: El Destape