En medio de la tercer ola del coronavirus, la cartera de Salud del gobierno de Horacio Rodriguez Larreta decidió cerrar un vacunatorio móvil en el barrio Zavaleta que atendía a niños y adolescentes con el fin de aplicar primeras y segundas dosis de vacunas contra el Covid-19.

 

Las organizaciones sociales del lugar manifestaron "preocupación por la situación" porque hay una saturación sanitaria que demanda vacunas para todos y personal de salud por la cantidad de contagios. "La única farmacia que hay está cerrada porque la farmacéutica esta contagiada", expresó Javiera Sarraz, referente del barrio Zavaleta, quien además aseguró que la decisión de Larreta "es un acto criminal" y que "hay una violencia decidida por parte del Gobierno de la Ciudad en no atender las carencias del barrio".

Desde el inicio de la pandemia, la Ciudad instaló varios dispositivos que funcionan en distintas dependencias o bajo la modalidad itinerante, como el Detectar, donde las personas del barrio se realizan los hisopados ante la aparición de los primeros síntomas. Además, existen postas de salud, instaladas en gazebos donde trabajan promotoras de salud de manera precarizada.

Sarraz expresó que la Ciudad tomó esa decisión porque "no hay personal" y tienen que redistribuirlo por otras zonas. "Muchas de esas postas fueron cerradas y no sabemos cuándo las van a volver a abrir", aseguró. "Con el comité de emergencia del barrio no tenemos con claridad cuantos contagios hay en la villa, no tenemos una claridad real, porque no se implementó un testeo masivo", recalcó la activista, quien informó que es imposible determinar la cantidad de chicos que aún quedan sin vacunar en la zona debido a que el último censo es de 2010 y la población dentro de la villa creció mucho en los últimos años.

Fuente: C5N