El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el presidente de YPF, Pablo González, se reunieron en La Plata para analizar el avance del proyecto para construir una planta de producción de Gas Natural Licuado (GNL), que estará en territorio bonaerense. YPF acaba de firmaron un acuerdo para reservar una locación en el puerto de Bahía Blanca, donde estará ubicada la planta. También participaron autoridades de la petrolera malaya Petronas, que realizará la obra de infraestructura junto con YPF. “Ambas compañías firmaron con las autoridades del puerto de Bahía Blanca una reserva para la futura locación del proyecto”, informó la estatal YPF.

Si bien era conocido que la compañía argentina y Petronas tenían la intención de construir la planta en el Puerto Ingeniero White (en un primer momento también circuló una versión de que podría instalarse en Río Negro, pero luego fue descartado), ahora dieron un paso más y reservaron formalmente un lugar para concretar la obra, que en una primera etapa demandará una inversión de 10.000 millones de dólares. Si la planta escala, el desembolso de ambas compañías podría trepar a los 40.000 millones de dólares, según los anuncios. Por tal motivo, YPF espera que el gobierno (en particular Sergio Massa) envíe al Congreso el proyecto de Ley de promoción de producción de GNL, que -entre otras cosas- establece contratos a 30 años, algo clave para la inversión en este tipo de infraestructura. 

Industrialización

La intención de ambas compañías es industrializar el gas no convencional de Vaca Muerta mediante la planta de licuefacción para poder exportarlo a través del puerto de Bahía Blanca a Europa y Asia. Según difundió YPF, la planta podrá “exportar más de 25 millones de toneladas/año de GNL, reducir las restricciones externas, multiplicar la actividad económica y generar miles de puestos de trabajo, además de convertir al país en un exportador de gas a escala mundial”. 

A modo de comparación, en la actualidad la Argentina importa en los meses de frío alrededor de 35 barcos de GNL. El proyecto de YPF y Petronas en su máxima capacidad podría exportar 460 buques por año. El GNL podría implicar cerca de 20.000 millones de dólares anuales en exportaciones.

Como ocurre con otros proyectos similares en el mundo, la obra demorará entre siete y ocho años y le permitirá a la Argentina convertirse en exportador de gas, un producto que el mundo demanda cada vez más. De concretarse, el país ingresará en el selecto grupo de 20 países que tienen plantas de producción de GNL a nivel mundial, justo en tiempos donde el precio se disparó por la guerra entre Rusia y Ucrania. Esta infraestructura es relevante porque permite almacenar y transportar gas por barco a otros países sin utilizar gasoductos.

Estudio

YPF viene analizando desde 2018 la posibilidad de construir una planta de GNL. Pero en septiembre del año pasado, YPF y Petronas firmaron un Estudio y Desarrollo Conjunto para realizar un estudio sobre la factibilidad para construir una planta de producción de GNL. En enero, autoridades de YPF recibieron en Buenos Aires a Nazri Idzlan Malek, el nuevo CEO de la compañía en la Argentina. Y a principios de mes, Pablo González, el CEO de YPF, Pablo Iuliano, y la secretaria de Energía, Flavia Royón, se reunieron en Houston (la capital petrolera de Estados Unidos) con Tengku Muhammad Taufik, CEO global de Petronas. Estos encuentros, más la reserva de la locación en el puerto de Bahía Blanca son pasos que las compañías van dando para concretar un proyecto a largo plazo y multimillonario.

La obra contará con plantas de tratamiento, almacenamiento, gasoductos e instalaciones de carga. El estudio determinará el tamaño de la planta y quién será, además de Petronas, el destinatario del GNL que se exporte. Ambas compañías por el momento no descartan que un nuevo actor se sume como tercer socio del proyecto.

En YPF confían en que los tiempos de construcción pueden acotarse por la experiencia de Petronas, ya que es una de las tres compañías más grandes del mundo en GNL. La petrolera estatal malaya fue una de las primeras en asociarse con YPF para producir hidrocarburos en Vaca Muerta, ya que desde 2014 operan el bloque de shale oil (petróleo no convencional) La Amarga Chica en Neuquén.

Fuente: El Destape