Ella es Rachel Dolezal, conocida como la “farsante racial” por haber vivido casi la mitad de su vida afirmando ser de tes negra cuando, en realidad, nunca lo fue. En 2015 sus propios padres revelaron que su hija estaba viviendo una mentira.

INSÓLITO ENGAÑO: Fingió ser negra durante más de 10 años, la descubrieron y perdió su trabajo

Luego de esa declaración, Rachel tuvo que afirmar que en verdad no nació con tes negra, sino que siempre “fue blanca biológicamente nacida de padres blancos”, y alegó que la raza “no está codificada en su ADN”.

El secreto develado le trajo serias consecuencias a Dolezal quien fue fue despedida de su trabajo como profesora adjunta de Estudios Africanos en la Universidad de Eastern Washington y se vio obligada a renunciar a un puesto de liderazgo en su capítulo local de Spokane de la NAACP.

En un documental que realizó un medio local, la joven aclaró que fue víctima de muchas burlas desde que estalló la verdad. “Me han llamado un insulto a las mujeres blancas y un insulto a las mujeres negras”, declaró allí.

Asimismo, afirmó que las mujeres blancas están enojadas porque hizo algo que ellas nunca harían. “Para las mujeres negras, siento que es una reacción al dolor. Es como un desencadenante del estrés postraumático “, agregó en el documento.

El matrimonio con su marido, Kevin Moore, también ocasionó trastornos a la mujer, ya que él fue el que trató de obligarla para entrar en un “molde blanco”, según cuenta la chica. En este sentido, cuenta que ella vivió mucho años reprimida a causa de los dichos racistas de su esposo. “Hacía comentarios sobre cómo ninguna mujer blanca tiene ese tipo de cola, necesitas una cola blanca respetable”, dijo.

“El estándar de belleza históricamente ha sido el blanco y eso ha sido protegido y mantenido en el tiempo”, sentenció.

Lo cierto es que sus mentiras acarrearon problemas y en febrero de este año denunció no poder conseguir trabajo por fingir ser “negra”.

Rachel afirma que ella sigue siendo la misma persona que antes, a pesar de lo que les hizo creer a todos durante tiempo,, y que sigue haciendo bien su trabajo, pero que ahora todo es mucho más difícil porque la catalogan como una mujer “transracial”, un prejuicio que, colateralmente, le trae muchos problemas.

Fuente: La 100