El ministro de Economía, Martín Guzmán, pidió un consenso con la oposición para que la estabilización económica sea una política de Estado. Además, ratificó que el nuevo programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI), tras el fracaso del acuerdo del macrismo por un endeudamiento histórico, pasará por el Congreso para que sea ratificado.

En en la cumbre GZERO Latinoamérica 2020, de Eurasia Group, el funcionario apuntó como objetivo solucionar el aumento de la pobreza. Además, adelantó que el Indec revelará una inflación menor que en octubre, la marca más elevada del año. “La construcción va a tener un rol fundamental en la recuperación”, enfatizó Guzmán la disertación a la que asistió virtualmente El Destape. Al respecto, aclaró que se mandaron dos proyectos de ley para potenciar el sector.

El mandamás de Hacienda no le esquivó al declive en la calidad de vida a raíz de la pandemia. “Tenemos una situación donde 40% de la población está en niveles de pobreza”, precisó. Si bien la UCA lo estimó en 44,2% en el tercer trimestre, dato que se conoce de forma anticipada al del Indec. “Es un problema que debemos resolver. La forma de ordenar es arreglando los problemas fundamentales que la economía y la sociedad”, aclaró.

Después de un año más perdido en la recesión iniciada en 2018, Guzmán reforzó el optimismo exhibido en el Presupuesto para el año próximo. “Vemos un horizonte de recuperación claro para 2021”, estimó. Ante esto explicó “la recuperación es condición necesaria para la estabilización. La consolidación fiscal tiene que ir a una velocidad consistente con la recuperación”.

Para eso volvió a requerir el apoyo de la oposición al plan económico, así como lo consiguió a la hora de reestructurar la deuda con el 99% de aceptación: “Queremos una legitimación y un respaldo amplio para que la estabilización económica sea una política de Estado”. Adelantó que este programa tendrá como uno de sus objetivos sumar dólares a las reservas del Banco Central, que cayeron durante la pandemia.

“Necesitamos ir acumulando reservas internacionales que nos permitan los controles de capitales que son defensivos que se corresponden con una situación de emergencia, e ir hacia unos macroprudenciales. El programa que presentamos en el Congreso va a tener metas de reservas internacionales”, anticipó.

En su exposición también hizo referencia a la participación de la oposición en el nuevo acuerdo con el Fondo. “Vamos a enviar el programa con el FMI al Congreso. Eso no se hizo nunca. Queremos una legitimación y un respaldo amplio para que la estabilización económica sea una política de Estado”, dijo en contraste con la gestión de Mauricio Macri, que actuó de forma unilateral e inconsulta para endeudar al país en U$S 45.000 millones que consumió en fuga de capitales en menos de un año.

“Ha habido una relación con el FMI con ciertas turbulencias, en una secuencia de programas que no funcionaron. El último programa stand by entra en ese universo”, cuestionó el ministro. En concreto se refirió al crecimiento de la inflación en 2019 hasta el 54% y que el préstamo “fue visto por muchos como un préstamo político”.
 

Después de todo esto, Guzmán pidió que “hay que mirar hacia adelante actuando con responsabilidad buscando cambiar el curso de estas historias. Esa es la posición del Presidente (Alberto Fernández) y de (la jefa del FMI, Kristalina) Georgieva”. “Estamos trabajando de forma constructiva”, concluyó.
Fuente: El Destape