Cambiemos debate cómo frenar los exabruptos de diputados como Fernando Iglesias o Waldo Wolff que complican la campaña, pero por ahora no parece haber ninguna solución. "Para ordenar a alguien tenés que tener autoridad sobre esa persona, en el caso de ellos dos no puede hacerlo Horacio", se lamentaron en Parque Patricios.

"No leyeron el manual", bromearon en el PRO cuando LPO preguntó por las patinadas de legisladores ultra macristas tras la publicación de un código para la campaña. "No tienen límite. ¿A vos te parece que hay que explicar que no pueden decir las cosas que dicen? Son muy border, es un problema sin solución", señalaron.

Según explican en Parque Patricios, Iglesias no responde a ninguna terminal adentro del macrismo. Llegó a la lista por pedido de Patricia Bullrich, pero no le responde a la ex ministra de Seguridad. Macri fue uno de los que pidió por él, pero tampoco es un "puro".

En la Ciudad hay bronca porque con los escándalos que generan sus declaraciones y tuits Iglesias puso a Juntos por el Cambio a la defensiva. "Pareciera que a Iglesias lo mandó el kirchnerismo, en unas horas dio vuelta una discusión que había complicado al gobierno", dijeron.

Como publicó LPO, Iglesias cambió el eje de la discusión por las visitas de particulares a Olivos. "Hubieran tenido que explicar por qué iba gente a Olivos que no era esencial. Ahora estamos nosotros tratando de explicar a Iglesias", se lamentaron en Cambiemos.

A pesar de que Horacio Rodríguez Larreta logró imponer a sus candidatos en la Ciudad y cerró con casi todo el PRO en la Provincia, los primeros días de campaña demostraron que en Cambiemos aún hay resistencias internas. Primero fue Facundo Manes, después Gerardo Morales y luego los radicales de la línea Brandoni.

"Por ahora esto es una mesa redonda, con lo bueno y lo malo que tiene. Somos plurales y diversos, pero no hay nadie sentado en la cabecera. Entonces un día viene Morales y dice lo que dice, otro días es Manes y otro Iglesias. Y te la tenés que bancar", se resignaron en el larretismo.

Hasta ahora Larreta había atravesado las campañas porteñas sin demasiados sobresaltos. En el gobierno recuerdan la comparación de Elisa Carrió entre Walt Disney y Santiago Maldonado, pero piensan que esa fue la única frase poco feliz de la campaña 2017. En cambio las frases de Iglesias llegaron cuando recién está comenzando.

Fuente: LPO