La defensa de la vicepresidenta Cristina Kirchner presentó los recursos extraordinarios para pedir la nulidad de los fallos de la Cámara Federal de Casación Penal que revocaron su sobreseimiento en las causas “Los Sauces-Hotesur” y Memorándum de Entendimiento con Irán, y que al mismo tiempo ordenaron que se hagan los juicios orales.

“La decisión de la Cámara Federal de Casación Penal importa un severo gravamen a los derechos y garantías constitucionales que asisten a nuestros representados. De no mediar la intervención de la Corte Suprema de Justicia por la vía del art. 14 de la ley 48 habrán de consolidarse, como ya se dijo, agravios de imposible reparación ulterior”, sostiene el escrito presentado por los abogados de Cristina, Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, ante la Casación, para que los casos pasen a la Corte.

Entre los argumentos por los que la vicepresidenta pidió la nulidad de ambos fallos aparece uno que se insinúa como una polémica de largo plazo: la ausencia en la decisión de la jueza Ana María Figueroa.

Se trata de la magistrada a la que la Corte Suprema cesanteó el 6 de setiembre último, pero a quien el Senado le otorgó un nuevo acuerdo para su continuidad después de los 75 años de edad la semana pasada.

La defesa de la vicepresidenta criticó la decisión de la Corte cuando aún estaba pendiente de tratamiento el nuevo acuerdo para la continuidad de Figueroa: "Resulta contraria a la práctica seguida con relación a otros magistrados que se encontraban en idéntica situación".

En ese mismo expediente, quedó firme el sobreseimiento definitivo de Florencia Kirchner, la única de todos los imputados a los que el máximo tribunal penal desvinculó de la supuesta maniobra de lavado y dádivas. El fiscal general Mario Villar consintió el sobreseimiento dispuesto por un tribunal oral y ratificado por la Casación.

Fuente: C5N