En los últimos días, trascendió que el rey Carlos III le pidió a los duques de Sussex, su hijo Harry y su nuera Meghan, que desalojen Frogmore Cottage para permitir que el príncipe Andrés ocupe la casa.

Según confirman medios británicos, las conversaciones entre el palacio de Buckingham y príncipe Harry, que actualmente viven en Montecito, California, Estados Unidos, están en marcha desde que publicó en enero sus polémicas memorias, tituladas En la sombra, que no fueron del agrado de la casa real, pero se han intensificado recientemente.

La causa de esta aceleración, según informa The Telegraph, es el príncipe Andrés, duque de York y hermano de Carlos III. Desde finales de 2019, cuando tuvo lugar la desastrosa entrevista a la BBC en la que quiso desmarcarse, sin éxito, de las turbias actividades de su amigo, el millonario pedófilo estadounidense Jeffrey Epstein, fue apartado de cualquier actividad pública de representación de la monarquía británica y, más adelante, a principios de 2022, le fueron retirados todos los títulos militares y patronatos reales que poseía.

Este año, a partir de abril, el duque de York dejará de recibir, además, su asignación anual de 249.000 libras (282.370 euros al cambio actual), lo que le incapacita para mantener su residencia actual en Windsor. De ahí que Carlos quiera trasladar a su hermano a esa casa, recién reformada.

Una decisión, por tanto, que no ha sentado nada bien a Harry y a Meghan, según fuentes cercanas a la pareja consultadas por la prensa británica, que afirman que han vivido esta decisión como “un castigo final muy cruel”. La pareja tendría hasta principios del verano para sacar del lugar sus pertenencias.

Aunque, el rey considera que su hermano es un mal heredado por Isabel II para la imagen de la corona británica, no quiere dejar a su hermano “sin hogar y sin un centavo”, lo que sugiere que se están haciendo arreglos alternativos para su realojamiento.

Carlos III desalojó inesperadamente a su hijo Harry y a Meghan Markle del "único lugar seguro" que tenían en Inglaterra

La historia de Frogmore Cottage

Frogmore Cottage es la casa en la que el hijo menor de Lady Di y Meghan Markle decidieron hacer su vida como miembros de la familia real británica, un refugio más discreto y pequeño que el palacio de Kensington. 

Se trata de una bella casona en los terrenos de Windsor que reformaron a su gusto. Con 10 habitaciones, un estudio, un invernadero, acristalamiento especial para protegerla de los ruidos del cercano aeropuerto de Heathrow y una pista de tenis.

Carlos III desalojó inesperadamente a su hijo Harry y a Meghan Markle del "único lugar seguro" que tenían en Inglaterra

Frogmore, a una hora de Londres, fue elegida por los duques como su residencia principal ante el asombro de muchos. Según explicaba el diario The Sunday Times, decidieron marcharse allí porque Markle estaba convencida de que en los palacios londinenses se urdía una conspiración contra ella. En ese sentido, según relatan en The Telegraph, “el inmueble es el único lugar seguro” que les queda a los duques en Inglaterra, quienes se encuentran inmersos en una batalla legal para obtener protección policial en Inglaterra.

La noticia del desalojo de los duques de Sussex llega en un momento en el que su popularidad está por los suelos, y a escasos 66 días de que se produzca la coronación de Carlos III, una tradición con 900 años de historia que tendrá lugar el 6 de mayo en la abadía de Westminster y que supone el punto culminante y cargado de simbolismo. El desalojo parece levantar aún más dudas sobre si los duques de Sussex recibirán una invitación a la ceremonia.