Cállate y mirá, acá están gobernando: Macri empezó a hablar sin saber sobre las clases presenciales

Sostuvo que “un nuevo año comenzó y las definiciones sobre la apertura de las escuelas aún siguen sin resolverse”. “Las autoridades del gobierno nacional insisten en condicionar el retorno a clases a la situación epidemiológica, incluso cuando desde noviembre pasado la Organización Mundial de la Salud (OMS) defiende la necesidad de mantener las escuelas abiertas porque se ha comprobado que los niños y adolescentes no son vectores principales de contagio y tienen más probabilidades de contraer el virus fuera del entorno escolar que dentro”, recalcó.

El reclamo de Macri se da en un contexto de crecimiento de contagios de coronavirus. “Muchas madres y padres de distintas provincias con los que he conversado en estos últimos meses me manifestaron que desean que sus hijos vuelvan a la escuela y, lo que es peor, no entienden por qué esto no sucede si “todo el mundo está en la calle”. Más allá del temor lógico por posibles riesgos, son ellos quienes tienen más clara la importancia de la educación de sus hijos, más aún luego de un año estando involucrados como nunca antes con sus aprendizajes”, indicó.

Mauricio Macri

En este marcó, fogoneó nuevamente a la ciudadanía. “Por estas razones es que quiero llamarlos a la acción: No dejemos que el debate sobre la educación continúe monopolizado por los líderes gremiales que durante los cuatro años de nuestro gobierno han dejado a los chicos sin clases por "luchas" que ahora parecieron abandonar. En este último tiempo se han convertido en portavoces de las excusas del gobierno y no han sido capaces de disimular que sus intereses políticos son los que guían sus acciones y están por encima de las necesidades de los docentes y del derecho a aprender de los chicos”, sostuvo el ex mandatario.

En su reclamo, Macri no hizo referencia al desfinanciamiento de la educación durante su gobierno. Cabe recordar que tras un informe elaborado por equipos de investigadores de siete universidades se concluyó que el recorte de fondos que sufrió el sistema educativo en el período 2016-2019 fue del 35 por ciento. En el mismo, se destacó cómo se desfinanciaron especialmente las políticas dirigidas a enfrentar las desigualdades socioeducativas.