"La verdad, no tengo idea", le dijo a Patricia Bullrich a El Destape, ministra de Seguridad de Mauricio Macri y presidenta del PRO nacional, luego de que el Gobierno de Luis Arce revelara que la gestión de Cambiemos envió armamento bélico para apoyar el golpe de Estado contra Evo Morales en Bolivia. En la misma sintonía, el ex canciller Jorge Faurie intentó explicar lo sucedido y puso en duda la información oficial: “Primero que nada hay que ver si ese envío realmente existió. No pasó de modo alguno por la Cancillería. No sé si alguna autoridad argentina intervino en eso”.

En conferencia de prensa, el Canciller boliviano, Rogelio Mayta, denunció que tuvieron "acceso a un documento que pone en evidencia que el gobierno de Macri en Argentina aportó con material para que se pueda reprimir la protesta social y consolidar el gobierno de facto de (Jeanine) Añez". Acto seguido, mostró una carta clave dirigida al embajador argentino macrista en el país vecino para "agradecerle por la colaboración prestada a esta fuerza armada".

En la misiva, detalló el material bélico químico recibido: "40.000 cartuchos AT12/70; 18 gases lacrimógenos en Spray Mk-9; 0.5 gases lacrimógenos en Spray Mk-4; 50 granadas de Gas CN; 19 granadas de Gas CS; 52 granadas de Gas HC". Alberto Fernández, tras conocerse la denuncia, le pidió disculpas al pueblo boliviano en nombre de toda la Argentina.

Una vez realizada la acusación por parte del Gobierno de Bolivia, Patricia Bullrich le dijo a El Destape que no había visto nada en ningún medio de comunicación. Al reenviarle varias notas periodísticas y la carta dada a conocer, con fecha del 13 de noviembre del 2019 (tres días después del golpe), respondió: "La verdad, no tengo idea".

En la misma línea, Faurie le dijo a Crónica Tv que “no se envió ningún material de ningún tipo”. "Ni de papeles, ni gases lacrimógenos, ni de ningún otro elemento. Tengo claro las gestiones y las instrucciones que le dieron al entonces Embajador para que ofreciera refugio a distintas figuras que se sentían amenazadas o inseguros por los acontecimientos”.

El canciller de Mauricio Macri sostuvo que en el Gobierno boliviano “tendrán que esclarecer el origen de la carta” que envió el Comandante General de la Fuerza Aérea al entonces embajador argentino en el país vecino. Y, además, dudó del contenido de la misiva: “Primero que nada hay que ver si ese envío realmente existió. No pasó de modo alguno por la Cancillería. No sé si alguna autoridad argentina intervino en eso”.

En nombre del pueblo argentino, Alberto Fernández le pidió disculpas a Bolivia y detalló: "Se constató que desde nuestro país se remitió una partida de material que no puede ser interpretada sino como un refuerzo a la capacidad de acción de las fuerzas sediciosas contra la población boliviana en esos días. Se trató de una colaboración decidida por el gobierno del entonces presidente Mauricio Macri con la represión militar y policial que sufrieron quienes defendían el orden institucional en su país" y los hechos "están siendo analizados por un grupo interdisciplinario de expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos".

Normando Álvarez García es la persona apuntada en la carta de agradecimiento por la colaboración con el golpe de Estado en Bolivia y hoy forma parte de un gobierno provincial macrista. Es actualmente el ministro de Trabajo de Jujuy, designado por Gerardo Morales.

Fuente: El Destape