La anunciada donación de vacunas que hará Argentina a Bolivia --un millón de dosis de AstraZeneca con el principio activo fabricado en el país--, que constituye la mayor entrega de este tipo entre Estados de Sudamérica, se concretará este lunes. El cargamento partirá a primera hora de la mañana desde El Palomar, en el mismo avión Hércules de la Fuerza Aérea argentina que dos años atrás se usó para el envío de municiones, gases lacrimógenos y granadas para apoyar el golpe de Estado, y llegando a la misma base militar boliviana cercana a La Paz . En el mismo hangar de la Fuerza de Tarea Aérea Diablos Negros boliviana descenderá ahora el cargamento que se da en el marco de la reciprocidad en la distribución de vacunas, de la que también se benefició Argentina cuando llegaron las primeras dosis.

Oficializada el viernes por la noche a través de un decreto presidencial, la decisión de la "donación a título gratuito a favor del Estado Plurinacional de Bolivia" de un millón de dosis, involucra la logística del Ministerio de Salud y de Cancillería, y en particular de Cascos Blancos. En el Hércules C-130 irá también una delegación encabezada por la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y la titular de la Comisión de Cascos Blancos, Sabina Frederic.

La estrategia de la solidaridad

"La pandemia constituye un desafío global que exige una estrategia de solidaridad orientada al acceso equitativo de las vacunas destinadas a generar inmunidad contra la covid-19", sostiene en sus considerandos el decreto, que lleva las firmas del presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Juan Manzur, el canciller Santiago Cafiero y de Vizzotti. "Guiados por los principios de solidaridad y fraternidad, nuestro país estima conveniente favorecer el acceso equitativo y oportuno a las vacunas destinadas a generar inmunidad adquirida contra la Covid-19", explica el anuncio.

"Lo dijimos desde el primer día, y no sólo lo decimos sino que también hacemos : hasta que todos los países no accedan a las vacunas, no vamos a poder dar vuelta la página de la pandemia", advirtió Vizzotti en diálogo con Página/12. "Entonces, habiendo superado el 82% de la población argentina con una dosis y el 68% con esquema completo, contando con el stock de vacunas necesario para iniciar y completar esquemas pendientes y seguir impulsando la vacunación con dosis adicionales y de refuerzo a la totalidad de los argentinos, hoy estamos en condiciones de llevar a cabo esta donación", explicó. La funcionaria marcó también que, si bien esta será la donación más importante que haya realizado la Argentina, "nuestro país ya viene colaborando con países del Caribe, de África y de Asia, como parte de un ciclo de reciprocidad y solidaridad internacional".

De las armas a las vacunas

"El proceso que vivimos en Argentina, con el stock ya dispuesto para completar todas las fases de vacunación para el 100% de la población, nos ubica en un lugar de vanguardia regional e internacional", sumó Frederic. "Eso nos permitió fortalecer nuestro compromiso con el resto del mundo, enfocamos cada una de las donaciones a lugares donde las vacunas son efectivamente necesarias. Es la política reclamada por el Presidente en el último encuentro del G20 y somos coherentes con la exigencia para reducir la desigualdad en el mundo". La necesidad actual de una "conciencia solidaria en materia de salud" se enfoca ahora hacia "el sueño de una verdadera integración en la que, en vez de enviar municiones para atacar al pueblo boliviano, se envíen dosis para cuidar y reconstruir el proyecto latinoamericano mediante políticas de salud", estima la fncionaria. Y habla de "reducir las desigualdades dentro del continente más desigual del mundo". 

El Embajador Ariel Basteiro, quien estará recibiendo el cargamento junto al canciller boliviano Rogelio Mayta y el ministro de Salud de ese país, Jeyson Auza, destaca en diálogo con este diario la particular coincidencia que aparece. "Hace poco más de dos años, en el mismo sector donde va a estacionarse el Hercules, la dictadura de Jeanine Añez recibía del gobierno de Mauricio Macri grupos de elite de gendarmes con armamento y 70 mil municiones contrabandeadas, para reprimir, llevar dolor y muerte al pueblo boliviano. Hoy el gobierno de Alberto Fernández está llegando con Cascos Blancos, en una misión de paz y solidaridad, con un millón de vacunas", compara. 

“Esta es una clara muestra del lugar geopólitico que hoy ha asumido Argentina. De que existen gobiernos como los de Mauricio Macri que trabajan por la desunión de los países latinoamericanos, y por otro lado, gobiernos como los de Alberto Fernández que buscan reconstruir los lazos de hermandad y amistad entre Argentina y Bolivia”, expresó el embajador.

Fuente: Página 12