Rodrigo Lussich y Adrián Pallares dieron una extensa entrevista a VOS en la que se manifestaron principalmente sobre el rol que están cumpliendo como conductores de Intrusos a partir de este año, aunque también dejaron declaraciones picantes sobre otros temas.

Es que ambos supieron trabajar con Viviana Canosa, conductora que últimamente está generando titulares con sus teorías conspirativas y opiniones sobre el manejo de la pandemia, entre otros aspectos que no sólo generan polémica: la dejan al borde de la irresponsabilidad en su rol de comunicadora.

Los periodistas, sin embargo, no se sorprenden por este giro de Canosa, argumentando que sencillamente no ha hecho más que mostrarse como realmente es.

“Viviana siempre fue esto, hubo un período en el que la gente la veía más tranquila o reposada pero siempre ha sido una mujer que ha salido a la polémica. Canosa nunca pasaba desapercibida, ahora se mete en temas complicados pero la Canosa que ven es la que siempre fue”, interpretó Pallares.

Lussich, en tanto, fue más allá y especula con que este perfil le pasará factura a la conductora. “Creo que eso no justifica que esté metiendo la pata. Los que la conocemos sabemos que hay una Viviana de cámara y otra Viviana detrás de cámara, pero bueno... ella trabaja mucho en su Viviana pública. Está haciendo show, provocando, pero en el medio está generando una distorsión informativa en cuanto a cuestiones sanitarias graves. En su afán de provocar está corriendo ciertos límites pero, de todas maneras, es una auténtica Viviana. No la justifica, pero es auténtica. Ella pagará el precio que quiere pagar por ser la que es hoy. Juega a pleno, a todo o nada. El tiempo dirá cómo le saldrá la jugada. En dos años hablamos”.

Por último, en cuanto a haber trabajado con Viviana y con Jorge Rial, ambos coinciden en que no volverían a trabajar con ninguno de los dos. “Son etapas cumplidas”, aseguran.

“Nadie compra un auto que ya vendió. Fue divino, la pasaste bárbaro, te llevó a todos lados, pero cuando podés, comprás un auto nuevo. Hay algunas estructuras uno ya no quiere repetir, las disfrutaste a fondo, pero no te queda más por explorar”, ejemplifica Pallares.

Fuente: La Voz