Mientras avanza la investigación judicial que procura armar el complejo proceso que llevó a Diego Maradona a la muerte, este domingo 29 de noviembre se llevan a cabo dos allanamientos en la casa y la clínica del médico Leopoldo Luque, que en los últimos meses se había convertido en el profesional que seguía en forma personal el tratamiento de Maradona.  Los procedimientos se dan en el marco de un posible homicidio culposo en la muerte de Maradona, y fueron pedidos por la fiscal que interviene en la causa, Laura Capra, de la UFI de Benavídez, con quien colaboran en la trascendente causa el fiscal general John Broyad, y sus dos adjuntos en San Isidro, Patricio Ferrari y Cosme Iribarren. El juez de Garantías de San Isidro Orlando Díaz accedió a esos pedidos, autorizando los procedimientos que se realizaban este domingo. En los últimos días varias personas del entorno más cercano a Maradona hablaron de tensas situaciones con Luque en la casa que ocupaba el exfutbolista en el barrio San Andrés tras la operación por un hematoma subdural, y al menos dos testigos dijeron que el 19 de noviembre, Diego Armando Maradona tuvo una pelea con Leopoldo Luque, y que hubo un empujón en la misma, un episodio grave teniendo en cuenta que el ídolo popular había sido intervenido quirúrgicamente de la cabeza el 3 de noviembre y se le encomendó no hacer esfuerzos físicos. 

En el marco de la investigación la Justicia dispuso entonces varios allanamientos, entre los que están la casa y la clínica en la que atiende el doctor Leopoldo Luque. Así etonces, la causa caratulada en primera instancia como "averiguación de causales de muerte", podría virar hacia un posible "homicidio culposo". Este sábado 28 de noviembre los fiscales habían tomado las declaraciones de Dalma, Giannina y Jana Maradona, las tres hijas reconocidas del futbolista desaparecido, y sus testimonios habrían apuntado a Luque, cuestionando la forma en que se manejó el tratamiento de Maradona. Las hijas de Maradona señalaron que quieren saber cómo era el tratamiento a que se sometía a su padre, que medicamentos le administraban en sus últimas semanas de vida, principalmente desde que apareció el hematoma subdural en la cabeza, que por recomendación de Luque, fue operado en la Clínica de Olivos. 

Fuente: Perfil