Muchas veces las personas tratan a los animales como si fueran sus propios hijos y se preocupan cuando se exceden de peso, teniendo en cuenta las enfermedades que eso puede atraer.

En la ciudad inglesa de Bristol, Sara Matthews adoptó a su gato Ketih para juegue con su hija y si bien sabía que el animal tenía ciertos problemas médicos, lo que nunca se imaginó es que debía cerrar su heladera por la habilidad de la mascota de robar la comida.

Todo eso comenzó en 2020, cuando vio como el felino incrementaba su peso y casi no podía caminar, por lo que decidió gastar miles de dólares para intentar ayudarlo a adelgazar. 

Si bien lo llevó a varios veterinarios y parecía que la estrategia nutricional funcionaba, Keith tenía la extraña habilidad de robarse la comida abriendo la heladera. Ese motivo la llevó a ponerle candados a prueba de niños a su refrigerador, pero para su propio gato.

"Hemos tenido candados para niños en el refrigerador desde que obtuvimos a Keith. Al principio se trepaba cuando abría la heladera y estaba tan preocupado de que quedara atrapado sin que nos diéramos cuenta. A medida que avanza, hemos tenido que poner más y más cerraduras en cada armario con comida. No importa si es una manija circular o una polea, él encontrará la manera de entrar", afirmó.

"Uno de los últimos armarios que hice a prueba de Keith tenía una pesada bolsa de basura frente a él. Se las arregló para apartar esta bolsa y se metió en sus bolsas de comida. Ahora tuve que poner todas sus raciones en recipientes de plástico con tapas que se abren. Hemos probado alimentadores de rompecabezas para reducir su velocidad, pero simplemente los volcó", detalló.

El tratamiento y los medicamentos para el gato

Según explicó la mujer, una vez que la mascota ingresó a su casa todos intentaban darle de comer y eso fue lo que llevó a pesar más de 2 kilos.

"Hemos gastado decenas de miles de dólares en él a lo largo de los años. Estaba tomando muchos medicamentos en su primer año tratando de solucionar los problemas con sus ojos y oídos cuando era un gatito", aseguró.

"En un momento tuvimos comida especialmente preparada para él, ya que tenía un problema urinario y la comida habitual para eso es tan alta en calorías que no podía arriesgarme a que se la comiera. La comida costaba 50 dólares la bolsa y estuvo en eso durante tres años. En 2020 pagamos cientos por análisis de sangre para la enfermedad de Cushing, diabetes y más, pero todos resultaron negativos. Debido a su tamaño, también existe la preocupación de que no se despierte de la anestesia en caso de tener que someterlo a una operación", detalló.

"Es un círculo vicioso para él. Cuando toma antibióticos, le causa más problemas de estómago, por lo que tiene que comer con un estimulante del apetito para darle ganas de comer, lo que agrava los problemas de peso", prosiguió.

Las críticas por el peso de Keith

Si bien muchas personas le sugirieron que deje que Keith elija la vida que quiere hacer, hubo otros internautas que la criticaron porque no lo estaban cuidando como corresponde.

"Recibimos críticas en línea y si hubiera visto un gato de su tamaño hace años, habría pensado que no lo estábamos cuidando o sobrealimentándolo. Ese no es el caso de Keith. He tenido gatos durante 30 años, pero nunca he tenido uno con tanto sobrepeso. No sabemos qué más hacer", cerró.

Del Instagram de keith_the_cat_cow
Del Instagram de keith_the_cat_cow