Insólito. A Lanata se le acabaron los argumentos para seguir culpando a la "pesada herencia" y ahora acusa al kirchnerismo por la suspensión del partido Argentina-Israel que, en una movida geopolítica, había arreglado el Gobierno de Macri.

"Hubo mucha presión durante la gira de la Selección para que no jueguen el partido. Ustedes habrán visto imágenes donde les mostraban a la Selección camisetas argentinas manchadas con sangre. Fijense lo que se averiguó ahora, el Gobierno tomó cartas en el asunto. Muchos de los manifestantes de esta protesta en Barcelona eran manifestantes K", fue la insólita acusación de Jorge Lanata.

Que alguien le avise que está haciendo un papel penoso!

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Fuente: TN Twitter