La crisis tiene nombres y rostros. Este es el triste caso de una señora jubilada que, luego de 46 años de trabajo, debe continuar trabajando para poder comer.

"Buen día señora, ¿Usted viaja en transporte público habitualmente?"

"Si, todos los días estoy viajando y trabajando, con 71 años, porque no me alcanza el sueldo. Todos los dias, si."

"¿Cuánto gasta por día?"

"Y... no sé. Yo vengo de Alpargatas con el 129 que pago $29 y ahora tomo el 12. Y 70 y algo de pesos más o menos"

"¿De qué trabaja?"

"Casa de familia. 46 años trabajé, desde los 16 años. Con 36 años de aporte para cobrar una miseria y pago $2700. $1200 me vino de gas el otro día, tuve que ir a dar de baja. No me lo cortaron todavía pero yo dije que no voy a pagar porque noi me alcanza querida", expresó la señora al borde de las lágrimas.

Este era el cambio: una jubilada tiene que trabajar para poder comer y no llega con los servicios

"¿Cuál fue el servicio que dijo que tenia que cortar?"

"El gas porque me vino $1200 y yo cobro $7600, gasto $2900 de medicación. Vivo en Alpargatas, vengo con el 129 hasta Constitución. A veces vengo en tren y tengo que caminar 16 cuadras para tomarme el tren, señor. La verdad que estoy pasando... malisimamente mal. La verdad es que no tengo ganas de hablar, no tengo ganas de nada. Ojalá me moriria ya porque la verdad es que no sirve de nada vivir ya en este país", expresó tristemente la señora.