Le llegó -o le está llegando- la noche a tal vez el juez más polémico y abiertamente opositor a un sector político que se haya visto: con fuerte impulso del actual bloque de consejeros opositores que eventualmente sería oficialistas ante un triunfo del Frente de Todos, el Consejo de la Magistratura reactivó dos denuncias que podrían cercar y complicar a Claudio Bonadio respecto a los expedientes disciplinarios que tiene en su contra por irregularidades en su actuación en las diversas causas a su cargo, principalmente la causa de los Cuadernos. 

Concretamente, dos acusaciones por mal desempeño contra Bonadio, el magistrado que tiene en sus manos el caso de las fotocopias de los cuadernos supuestamente escritos por el chofer Oscar Centeno y que además se erigió como el máximo enemigo de Cristina Fernández de Kirchner en la justicia, se reactivaron hoy en el Consejo de la Magistratura, a pesar del insistente esfuerzo del macrismo por desestimarlas.

La comisión de Disciplina y Acusación dispuso esta mañana volver a darle impulso a las denuncias realizadas por dos personas cercanas a CFK. Por pedido del consejero Diego Molea, el organismo decidió producir nuevas medidas de prueba y, de esta manera, se dejó de lado el pedido de desestimación que había presentado Juan Bautista Mahíques, el representante del Gobierno en el Consejo.

Se trata de dos denuncias realizadas en 2017 por el ex titular de la AFI Oscar Parrilli y por Carlos Beraldi, el abogado de la ex jefa de Estado, por supuestos abusos de Bonadio en la instrucción de distintos expedientes. 

Parrilli denunció a Bonadio por la supuesta falsificación de testimonios en una causa que investiga los gastos de un libro sobre toda la gestión kirchnerista. Beraldi, en cambio, señaló al juez por haber dispuesto medidas de prueba de manera arbitraria y abusiva con respecto al patrimonio de la expresidenta en la causa Los Sauces, en referencia al allanamiento show en la vivienda de la senadora nacional. 

Molea requirió que se le envíen copias de los dos expedientes judiciales que motivaron las denuncias contra Bonadio. Con esa información, el consejero puede evaluar pedir nuevas medidas de prueba para impulsar la investigación o, bien, apoyar el dictamen de desestimación que presentó el oficialismo. Pero si el expediente sigue su curso, probablemente recién tenga resolución durante el año próximo, es decir, con un nuevo gobierno que eventualmente encabezaría Alberto Fernández con Cristina como vicepresidenta.

Bonadio, el juez conocido como el "pistolero" que siempre pareció no temerle a nada incluso en tiempos en que el kirchnerismo antes de 2015 lo amenazaba con sanciones efectivas en el Consejo, podría complicarse y exhibir tiempos más cortos que los previstos en cualquier proceso de recambio normal. 

Los dos los expedientes que avanzarán a partir de hoy y no irán a archivo son el 135/17 y el 156/17, por sendas denuncias de Parrilli y Beraldi. En ambos, el consejero instructor es Mahiques, el hombre de Mauricio Macri en la Magistratura. 

Este último había propuesto la desestimación de los expedientes disciplinarios contra Bonadio. Según publicó Ámbito anoche, conversaciones de último minuto aseguraron el número suficiente para aprobar la reactivación de los casos.

En los pasillos de la justicia, se empieza a leer un clima de transición que tiene su correlato en el Consejo, en donde -como en todas las dependencias públicas- los “tiempos” políticos generaron nuevos condicionantes, que en este caso tienen que ver con que el oficialismo ya no tiene la fuerza para imponer la agenda y el timming para las decisiones.

Fuente: Política Argentina