*MACRISIS A PLENO* Cierran 2 fábricas textiles importantes y dejan a 57 personas sin trabajo

Drama laboral. Una postal de la sede de Alter, otra de las firmas del Parque que se derrumbó por la política de la gestión de Mauricio Macri, alentada por su dirigencia en Chubut.

Una tras otra se van cayendo las empresas textiles del Parque Industrial de Trelew. El jueves se conoció el cierre sorpresivo de Orot con 15 empleados y ayer se terminó de confirmar lo de Alter, con otros 42 operarios que se quedaron en la calle. Es decir que en sólo cuatro días cerraron dos fábricas y se destruyeron 57 fuentes de trabajo.

Hoy quedan en pie 11 empresas entre las textiles sintéticas y las laneras y no se superan los 700 trabajadores. Cuando en su época de explendor, entre los 70 y los 80, llegó a haber hasta 6.000 empleados.

El récord negativo está estrechamente vinculado con la estrepitosa caída del consumo interno que lleva a las empresas del sector a producir al 30% de su capacidad ociosa, y por otra parte al proceso importador de bienes que terminaron por dejar por el piso a un sector como el textil, que se sabe es de los denominados “sensibles”.

Las malas noticias para los exempleados de Alter no terminan allí. La firma en agosto del año pasado había presentado ante el Ministerio de Trabajo de la Nación un Procedimiento Preventivo de Crisis, con lo cual estaría habilitada para pagar las indemnizaciones al 50%. El apoderado estaría llegando a la ciudad el jueves y en principio se reuniría con representantes del gremio textil de la Asociación Obrera Textil, aunque también podrían participar las autoridades municipales.

Los trabajadores de mayor antigüedad tenían 42 años en la empresa. Alter producía lycra y trabajaba calzas, trajes de baño y camisetas para marcas reconocidas como Class Life o medias Cocot.

Desde la Municipalidad el titular de la Agencia de Desarrollo Productivo, Marcelo Oilvera, se mostró contrariado por las noticias y aseguró que existe una responsabilidad exclusiva de las políticas nacionales, porque “no sólo no acompañan y no dan ningún tipo de incentivo, sino que toman medidas que destruyen la industria, como la alta inflación que generan, tarifas dolarizadas y las tasas que hacen inviable cualquier tipo de inversión”.

Fuente: Enorsai