Este martes por la tarde se derrumbó un sector en construcción del aeropuerto de Ezeiza con el saldo parcial de un muerto y 13 heridos. Los trabajadores  denunciaron que trabajaban bajo presión para entregar el 10% de la obra para que Macri pudiera inaugurarla antes de la veda electoral.

Por su parte, José, capataz de la obra del aeropuerto, aseguró en C5N que "todos los contratistas" que trabajaban ahí lo hacían "bajo la presión" de tener que entregar la obra terminada el 15 de octubre cuando el plazo original era en diciembre de 2019.

El capataz reveló que él y sus compañeros trabajaban "en horario nocturno, cobrando en negro" para cumplir con los plazos nuevos.

"Superponíamos tareas. Nos chocábamos entre todos trabajando por la necesidad de apurar la obra para terminarla", aseguró el hombre. "En el área donde pasó el accidente está la empresa de Caputo, la empresa madre es Caputo", señaló.