¿Interna judicial?: Los jueces de Comodoro Py  dejaron plantado a Rosenkrantz

Con una notoria ausencia de la mayoría de los jueces federales conocidos de Comodoro Py, el presidente de la Corte Carlos Rosenkrantz dio su primer discurso en la apertura del año judicial, en el que llamó a los magistrados a superar la crisis de legitimidad y la falta de confianza de los argentinos en la Justicia.

Ubicados en la última fila de un auditorio que no estaba repleto como años anteriores, dieron el presente los jueces Daniel Rafecas y Sebastián Casanello, y solo por un rato Sergio Torres, que se fue al comenzar el discurso.

Faltaron en cambio Ariel Lijo, Rodolfo Canicoba Corral, Julián Ercolini, Marcelo Martínez de Giorgi, María Servini, Sebastián Ramos, Luis Rodríguez y la estrella del momento Claudio Bonadio, que mientras Rosenkrantz hablaba de fallos populares se dedicaba a dictar otros dos nuevos procesamientos contra la ex presidenta Cristina Kirchner.

La inauguración del año es el acto más importante, y esperado por el mundo judicial, no solo de la Capital sino de todas las provincias del país, y también por los otros poderes del Estado.

La era Rosenkrantz tuvo hoy su primera aparición formal con un discurso “hacia adentro” del seno del poder judicial, en el que el presidente del cuerpo llamó a los jueces a superar la crisis de confianza, a no buscar poder y a no dictar fallos que respondan al clamor popular.

Por primera vez desde hace años, el juez de la Corte Ricardo Lorenzetti, desde otro lugar, escuchó atentamente el discurso.

Por lo bajo se escuchaba decir que “los lorenzetistas” de Comodoro Py no habían asistido porque conocían de antemano el discurso de Rosenkrantz, que sin nombrar la palabra corrupción, dio a entender que hay mucha corrupción en la justicia.

En la última fila, Rafecas y Casanello asentían con gestos de aprobación el discurso de Rosenkrantz. Casanello tomaba nota atentamente sobre algunos puntos del discurso. Se lo escuchó decir que estaba de acuerdo porque la justicia “está fallando en las bases”, en la falta de legitimidad y de confianza.

Fuente:Minuto Uno