La locura de los hinchas de Boca no tiene limites ni fronteras. Tal es así, que un fanático reveló que vendió la Play Station de su hijo para poder viajar a Río de Janeiro y presenciar la final de la Copa Libertadores ante Fluminense en el estadio Maracaná.

En diálogo con Matías Pellicioni, periodista de TyC Sports, un simpatizante hizo su revelación luego de que le preguntaran qué era lo que había sacrificado para estar allí. "Yo vendí la Play, pero hasta ahí. Dejala ahí boludo", empezó diciendo.

Cuando el episodio ya revestía todo un contexto intrafamiliar, añadió otro dato muy importante en esta historia: "Me duele decirlo, pero mi hijo es de River. Lo hizo el abuelo. Por gallina, que lo mire por tele, ja".

Para este sábado 4 de noviembre, se esperan entre 100 y 150 mil hinchas de Boca que coparán la Ciudad Maravillosa para alentar al equipo de Jorge Almirón, que va por el sueño de todos y la Gloria Eterna.

El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, afirmó que "para los argentinos está preparada la estructura en el Sambódromo". Esperan alrededor 50.000 simpatizantes xeneizes allí.

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