​El partido iba a decir qué tanto le iba a costar a Racing la cantidad de situaciones de gol que desperdició en el primer tiempo. El equipo de Gago movió la pelota, hizo correr a los jugadores de Boca atrás de ella, y atacó donde vio el hueco. A veces abriendo la cancha con Chancalay y Rojas, en otras por el centro o con diagonales. O por la vía aérea. Miranda y Alcaraz no se adueñaron del juego pero fueron importantes desde la presión y la recuperación rápida.

Y cuando no había espacios, cada pelotazo desde los defensores podria transformarse en peligro. Así fue la primera a los 5 minutos, con un bochazo de Sigali que encontró a Charly que, sorprendido por lo solo que estaba, definió a las manos de Rossi. Faltó precisión en un testazo de Sigali. En un mano a mano de Chancalay. En un pecho y remate de Rojas afuera, antes de salir lesionado. El 1 de Boca también se quedó con una media vuelta de Copetti. Muchas llegadas para haberse ido en cero en los 45 iniciales.

¿Qué hizo Boca en ese PT? Lo que le dejaron hacer, y eso fue poco. La idea de buscar a Villa chocó contra un buen marcaje de Mura y la poca compañía de Fabra. Romero, de extremo derecho no fue incisivo. Y a Benedetto le quedó el arco de espaldas y lejos del área. Chila Gómez fue un espectador de un clásico con dos hinchadas, Varela fue eje de la salida, pero encontró pocos socios en Pol y Ramírez, bien tomados.

PARTIDO EN DESARROLLO.​