Con millones de vacunas llegando --2.780.000 en la semana que terminó y al menos 3.450.000 en la semana que empieza el lunes--, el desafío pasó a la cancha de la vacunación. La Provincia de Buenos Aires está enviado un millón de citaciones esta misma semana y un cálculo sensato es que empezará a vacunar a personas de 50 a 59 años, sin enfermedades previas, a mitad de mes, el 14 de junio, o a más tardar, en la semana que se inicia el lunes 21 de junio. La Ciudad de Buenos Aires viene más lento, pero también podría arrancar con menores de 60 a mitad de mes. Por de pronto, en el Ministerio de Salud porteño afirman que este martes ya convocarán a personas de 40 a 44 años con comorbilidades y luego en los próximos días seguirán bajando de edad hasta terminar con las personas de riesgo de 18 años. En principio, CABA podría estar vacunando a personas menores de 60, sin enfermedades previas, tal vez de 55 a 59 años, el 14 de junio, aunque va a incidir una decisión sobre estrategia vacunatoria. CABA quiere dedicar vacunas a aplicar la segunda dosis en lugar de privilegiar darle la primera a la mayor cantidad de porteños posible. 

Aviones

Mientras la oposición vocifera -antes hablaba de veneno y ahora grita que no hay vacunas-, los aviones que las traen se multiplican y la Argentina recibe seis millones Sputnik V y Oxford/AstraZeneca en los últimas dos semanas. Al final de junio podrían totalizarse no menos de 26 millones de vacunas, con muchas chances de que ese número se acerque a 30 millones.

Este lunes, con la llegada del embarque desde Albuquerque de 2.148.000 dosis se pasarán los 17 millones. El martes vendrá un avión de Rusia, como siempre con un poco más o un poco menos de 500.000 dosis. Desde México vendrá otro avión con las 800.000 vacunas anunciadas por Alberto Fernández y Andrés Manuel López Obrador que están un poco atrasadas por chequeos de la Anmat y AstraZeneca. Si se suman los compromisos por más vacunas desde Albuquerque, México y Rusia, más dos millones de Sinopharm que vendrán de China, se verá que la cifra de 26 millones a fin de junio es conservadora, no arriesgada. 

Provincia de Buenos Aires

Lo que está claro es que, con semejante cantidad de vacunas, la pelota pasa al terreno de la vacunación.

*El Ministerio de Salud bonaerense envió este sábado un millón de citaciones. La mitad para aplicar antes del martes y la otra mitad se aplicará entre el martes y el viernes. La mayor parte es para personas de 40 a 49 con enfermedades anteriores. 

*Pero en la semana siguiente, desde el lunes 7 de junio, el equipo de Gollán y Kreplak espera vacunar a todas las personas de 18 a 39 años con enfermedades previas. Son unas 400.000 personas. Si todo sale bien, podría terminarse con esa franja el domingo 13 de junio. Por supuesto que no es matemático, pero está la chance.

*En ese caso y si sigue como hasta ahora el flujo de vacunas, el Ministerio de Salud bonaerense convocará a vacunarse a menores de 60 sin enfermedades previas a partir del lunes 14 de junio. El llamado será a personas de 40 a 59, pero después se vacunará por edad, es decir empezando por los bonaerenses de 50 a 59. Puede haber algún atraso, pero parece seguro que, a lo sumo, los menores de 60 se empezarán a vacunar a partir del 21 de junio. 

En la actualidad, la Provincia de Buenos Aires está en condiciones de vacunar a 105.000 personas por día y está trabajando para subir a 150.000.

CABA

Fuentes del ministerio que conduce Fernán Quirós le adelantaron a este diario que este martes ya se abrirá la vacunación de personas de 40 a 44 años con enfermedades previas. 

Esas mismas fuentes calculan que en la semana del 7 de junio al 13 de junio se terminará de vacunar a todas las personas con comorbilidades, es decir a personas de 18 a 39 años con enfermedades previas. 

En ese caso, a partir del lunes 14 de junio, CABA citaría a menores de 60 sin enfermedades previas. Se abriría la inscripción entonces para personas de 55 a 59 sin comorbilidades. Sin embargo, hay un dato distintivo: CABA, en ese momento, empezará a usar vacunas para dar las segunda dosis que se puedan. O sea que habrá que dividir las vacunas entre las personas a las que se aplicará la dosis 2 y las de primera dosis. Es un debate sobre estrategia vacunatoria: parece claro que en situaciones de emergencia como la que tiene la Argentina, debería priorizarse la inmunización, al menos con una dosis, de la mayor cantidad posible de ciudadanos, postergando en todo lo que se pueda la segunda dosis, que sólo refuerza la primera. Sin embargo, parece que CABA elige otro camino.

En el resto del país las situaciones son distintas entre una y otra provincia. Hay distritos con vacunación adelantada -San Luis, La Pampa, Corrientes, Formosa, Misiones, Santa Cruz- e incluso algunos ya empezaron con menores de 60 sin enfermedades. De manera que el proceso está avanzado. También hay municipios bonaerenses muy adelantados. 

Más allá de las pecularidades, todo indica que mucho antes de fin de junio, en la mayor parte de la Argentina se desarrollará la vacunación de menores de 60. 

Si la vacunación sigue en paralelo con la llegada de vacunas, en el mes que empieza el martes se alcanzaría a inmunizar al 40 por ciento de la población, un nivel algo más bajo, pero parecido, al que hoy tienen los países europeos. A favor del Viejo Continente juega que hicieron confinamientos estrictos, o sea que arrastraban menos contagios, y que en la actualidad se benefician del factor climático: los virus respiratorios -dicen los infectólogos- “viven” mejor en tiempos fríos y las defensas tienen problemas en las mucosas que las hacen menos efectivas. Con el 40 por ciento de la población vacunada, Estados Unidos bajó de 4.000 fallecidos por día a 900. En el caso argentino, el pronóstico es que permitiría ir descomprimiendo las terapias intensivas y debería bajar la cantidad de fallecidos: hoy en día, la vacunación hace que ya haya descendido notoriamente la cantidad de mayores de 70 en estado crítico.

Mucho dependerá entonces del resultado del actual confinamiento, pero hay un horizonte de vacunación que no es muy lejano. "No vamos a poder hacer una fiesta en un sótano, pero en un par de meses iremos volviendo a algo parecido a la normalidad" auguran los funcionarios de Salud.